El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, aseguró este martes que el «espacio político para revivir el acuerdo nuclear con Irán puede reducirse pronto».
«Si queremos concluir el acuerdo, necesitamos (adoptar) decisiones ahora. Aún es posible, pero el espacio político para revivir el acuerdo nuclear con Irán puede reducirse pronto», dijo Borrell en su cuenta oficial de Twitter, tras conversar telefónicamente con el ministro de Exteriores iraní, Hossein Amir-Abdollahian.
Irán y Estados Unidos concluyeron sin avances las negociaciones indirectas que mantuvieron la semana pasada en Catar, bajo el auspicio de la Unión Europea, para tratar de resolver sus disputas bilaterales y relanzar el acuerdo nuclear, paralizado desde que en 2018 el expresidente estadounidense Donald Trump se desvinculase del pacto.
Desde entonces, Teherán negocia en Viena con Alemania, Francia, el Reino Unido, China y Rusia -y con EE. UU. de forma indirecta- la reinstauración del acuerdo de 2015, que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales, pero las conversaciones llevan paradas desde marzo.
Según ha dicho Borrell durante los últimos días, las cuestiones técnicas relativas a los aspectos nucleares y al levantamiento de las sanciones económicas están resueltas, pero Teherán y Washington deben resolver otros desencuentros bilaterales.
Irán pide que EE.UU. levante las medidas restrictivas contra la Guardia Revolucionaria, el cuerpo militar de élite del país persa, pero Washington no está dispuesto a ello.
Desde que Donald Trump sacó a su país del acuerdo, Irán ha empezado a enriquecer uranio por encima de los niveles que permite el pacto.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) anunció en un informe en mayo que las reservas de Irán de uranio enriquecido, en diferentes purezas (2%, 5%, 20% y 60%), ascendían a mediados de mayo a 3.491,8 kilos, frente a los 300 kilos permitidos (con una pureza máxima del 3,67%).
Además, la Junta de Gobernadores del OIEA aprobó una resolución en contra de Irán por su falta de transparencia por las trazas fisibles halladas en tres instalaciones no declaradas como nucleares.
Teherán respondió que esas trazas se deben a un sabotaje -supuestamente de Israel-, y apagó de 27 cámaras de vigilancia en diferentes instalaciones nucleares. EFE (I)