Quito, Ecuador
«Quiero tocar a la gente con mi arte. Quiero que ellos digan «él siente profundamente, él siente con ternura».
Vincent van Gogh
Los museos son espacios para fomentar la cultura. La estética brilla con cada lugar en los que puede un visitante posar la vista. Existen museos de enorme importancia, tanto por la infraestructura como por la variedad de obras de arte que allí se exponen (cuadros, esculturas, dibujos, grabados, arte moderno, fotografías, etc.). Uno de los más importantes de Inglaterra es la Galería Nacional ubicada en Londres.
Este museo fue inaugurado en 1824 (durante la época victoriana) y alberga más de 2300 pinturas en su interior. Entre ellas se destaca Los Girasoles de Vincent van Gogh. Esta es una obra que pertenece al postimpresionismo y que en la serie de cuadros relatan la vida de las flores (que es desde que son plenamente girasoles, hasta que se marchitan). Destacan los colores con pinceladas fuertes, con ligeros toques salteados y otros bastante agresivos.
El cuadro está inspirado en la amistad que tenían Van Gogh y Paul Gauguin, esto combinado con el hecho de crear un cuadro decorativo con temática natural que el neerlandés creó para su amigo. Así, aparte de ser un cuadro que represente lo natural, dejó claro que podía usar (casi más que en cualquier otro cuadro) su color favorito, el amarillo.
Los múltiples datos estéticos y el valor cultural de esta obra, sin embargo, pasaron a segundo plano cuando una pareja de mujeres activistas lanzó sopa contra el cuadro. La protesta, como en muchos de los casos, se volvió barbarie y quedó plagada por la irracionalidad y la ignorancia humana.
Este colectivo (Just Stop Oil) es la prueba viviente que el arte y la cultura estorba al activismo, al cuestionar y evidenciar la máxima capacidad creadora, minimizando a los radicales quiénes, sin hallar otro camino, contestan con violencia enceguecida, en lugar de pensar en soluciones reales para el cambio climático.
El conocimiento, tristemente, parece ya no calar en las nuevas generaciones quienes, a través de discursos sin sentido y vicios de la posmodernidad, se dejan llevar por las banalidades y el sinsentido.
Es por ello, es primordial, motivar la cultura general, el aprecio al arte, a las buenas costumbres, para que no se crea que arrojando sopa a un cuadro se cambia el mundo. Siendo, además, Van Gogh, un personaje que en vida fue marginado, su locura le llevó a mutilarse parte de su oreja, y nunca recibió ningún reconocimiento o elogio mientras estaba vivo. Mas, su arte, es un gran legado, que es deber de los ciudadanos, defender porque es parte de la historia y la pintura, implica, una de las expresiones más bellas del hombre.
