
La activista sueca Greta Thunberg criticó hoy al partido Los Verdes en Alemania por su apoyo a la demolición del pueblo de Lützerath, en el oeste del país, para la extracción de carbón del subsuelo.
La empresas como la energética RWE, dueña de los terrenos, deben rendir cuentas por la forma en que tratan a las personas, declaró a dpa Thunberg desde la cercana localidad de Erkelenz, en Renania del Norte-Westfalia.
«El hecho de que Los Verdes se comprometan con estas empresas demuestra cuáles son sus prioridades», añadió sobre el partido ecologista, que forma parte en la actualidad de la coalición de Gobierno en Alemania.
Destacados políticos verdes, como el ministro de Economía, Robert Habeck, defienden la demolición de Lützerath alegando que el carbón es necesario para mantener la seguridad energética de Alemania en medio de la actual crisis.
«El carbón que hay aquí en el subsuelo no hará bajar los precios inmediatamente. Cualquiera que piense así está fuera de la realidad», afirmó la fundadora de «Fridays For Future», de 20 años y que llegó a Alemania para apoyar la protesta contra el desalojo y la demolición de Lützerath.
«He estado aquí antes y entonces tenía un aspecto completamente distinto», declaró a dpa sobre el paisaje de cráteres de la zona minera de lignito de Renania. «Realmente parece Mordor. Demuestra de lo que es capaz la gente en las condiciones equivocadas. Muestra contra qué luchamos, qué queremos evitar».
En la novela de «El Señor de los Anillos» de Tolkien, Mordor es el reino arrasado y la base del malvado Sauron.
Thunberg ya había visitado Lützerath el viernes y denunciado la «violencia policial».
El jefe de la Policía de Aquisgrán, Dirk Weinspach -afiliado al partido Los Verdes-, rechazó vehementemente las críticas y afirmó que se había procedido con extrema cautela.
Mientras tanto, esta mañana continuó el desalojo, informó un portavoz policial. Los agentes treparon a los árboles, donde permanecen algunos activistas, y bajaron al menos a una mujer, según pudo ver una reportera de dpa.
RWE señaló que también están en marcha los preparativos para sacar a los activistas de un túnel.
La Policía indicó que esta operación no está en sus manos, pues está siendo tratada oficialmente como «un rescate» y la llevan a cabo RWE y miembros de Technische Hilfswerk (THW), una organización de voluntarios que trabaja en casos de defensa civil y está integrada en el Ministerio del Interior.
Sobre los manifestantes atrincherados bajo tierra, la activista Bente Opitz, de la iniciativa «Lützerath lebt» («Lützerath vive»), dijo que creen que «están bien». Tienen suficiente para comer y pueden resistir en el túnel varios días, explicó.
Según «Lützerath lebt», varias decenas de activistas siguen en Lützerath, en tejados y árboles.
La Policía no dio inicialmente ninguna información sobre el número de personas que aún permanecen en el pueblo abandonado. Con la demolición del pueblo, RWE pretende ampliar la mina a cielo abierto de explotación de lignito colindante.
Para esta tarde está prevista en la zona una manifestación de ambientalistas contraria a los planes. dpa