La duquesa de Sussex, Meghan Markle, ha decidido poner a fin a los rumores sobre su ausencia en la coronación de su suegro, el rey de Inglaterra, Carlos III. Lo ha hecho mediante un portavoz que ha enviado un comunicado a la edición británica de la revista ¡Hola!.
“La duquesa de Sussex vive su vida en el presente, sin pensar en la correspondencia de hace dos años relacionada con las conversaciones de hace cuatro años. Cualquier especulación de lo contrario es falsa y francamente ridícula. Alentamos a los medios de comunicación sensacionalistas y varios corresponsales reales a detener el circo agotador que solo ellos están creando”.
La coronación de Carlos III coincide con una fecha señalada para la duquesa: es exactamente el mismo día del cuarto cumpleaños de su hijo mayor, Archie. Su decisión de quedarse en Montecito (California) está motivada, según informan varios medios, por su decisión de poner a su familia por delante.
Sobre el papel del príncipe Enrique en la coronación de su padre se conocen pocos detalles, pero todos indican que el segundo hijo de Carlos III no tendrá un rol destacado. Según varios medios, el duque de Sussex, quinto en la línea de sucesión al trono, no estará presente en la procesión que seguirá a la coronación por las calles de Londres. Tampoco saludará desde el balcón del palacio de Buckingham junto al resto de la familia real.
De hecho, se marchará rápidamente de Londres tras el acto central para regresar a California y celebrar el cumpleaños de su primogénito ese mismo fin de semana.
Los actos por la coronación durarán tres días, sábado 6, domingo 7 y lunes 8 de mayo, que será festivo en el Reino Unido. El sábado tendrá lugar el acto más solemne en la abadía de Westminster, mientras que el domingo habrá un concierto en Windsor (con artistas todavía por confirmar) y el lunes un pícnic multitudinario. Según Omid Scobie, amigo y portavoz oficioso de Enrique, el del príncipe será un “viaje breve” al Reino Unido y únicamente estará presente en la coronación.
