Poco antes de haber sido acribillados Iván Aníbal Macías Romero, de 40 años, y Rosa Angélica Reto Suescún, de 28, habían retirado a sus dos hijos del colegio.
Luego de dejarlos en su casa salieron hacia la calle José Laborde y Décima Quinta, donde los asesinaron.
La pareja se movilizaba en un vehículo similar a un Tucson de color blanco. Iván quedó baleado sobre el volante de su carro, mientras que su esposa, y la madre de sus hijos, en la vereda.
El reporte policial señala que los criminales luego de dispararle a Iván salieron en una motocicleta, sin embargo, al ver a Rosa Angélica acercarse a ayudar a su marido regresaron y la mataron.
La pareja fue llevada al hospital Sagrado Corazón de Jesús, donde se confirmó el deceso de ambos. Ahí uno de los hermanos del fallecido dijo desconocer los motivos de la agresión. Aseguró que Iván era comerciante y no tenía enemigos.
Pese a que la Policía indicó que la pareja se movilizaba sola, otros allegados de las víctimas indicaron que presuntamente los mataron delante de uno de sus hijos.
El informe policial señala que los sicarios usaron pistolas calibre 9 milímetros para cometer el doble crimen, además que Iván Macías registraba antecedentes por el delito de porte de arma y asociación ilícita.
Una testigo del hecho violento contó a la Policía que minutos antes del suceso la pareja llegó al sector, Rosa Angélica ingresó a una casa junto a un bebé de un año, mientras que en el carro la esperaba su esposo.
En ese momento aparecieron dos hombres a bordo de una motocicleta y dispararon contra Iván, la testigo indicó además que de los dos motorizados, en las muertes participaron hombres a bordo de un carro, estos serían los que balearon a Rosa Angélica.
Una fuente policial indicó que al parecer la pareja había sido víctima de amenazas por motivos que aún se desconocen y están siendo investigados por los agentes de la Dinased.
Media hora después del crimen de Iván y Rosa Angélica, a las 19:30, en el sector 15 de Noviembre de la parroquia San Cristóbal, Anahí Alexandra A., de 18 años, fue baleada junto a Lizandro David A., de 30 años. Ambos serían víctimas colaterales de un atentado que iba dirigido a un vecino del sector.
En el distrito Quevedo–Mocache la Policía ha reportado desde el mes de enero a la fecha 156 muertes violentas, la mayoría motivada a problemas entre las organizaciones delictivas Los Lobos y Los Choneros que operan en la zona.