La Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) denuncia que, en tres semanas, se han robado cuatro transformadores eléctricos en distintos sectores de Guayaquil, presuntamente para extraer sus componentes metálicos y venderlos en recicladoras.
De acuerdo a Ricardo Vera, funcionario de CNEL en el Puerto Principal, los robos ocurrieron en Los Ceibos, la avenida Carlos Luis Plaza Dañín y el Suburbio. Cada uno de los transformadores cuesta 4.000 dólares, pesa unas 1 500 libras y su sustracción significa dejar sin luz a comunidades enteras.
La madrugada de este jueves 27 de julio un grupo de hombres intentó llevarse otro transformador de Urdesa. Una cámara de videovigilancia captó el momento en que los sujetos trataban de trepar el artefacto en una camioneta.
Constante robo de cables
Los cables que cuelgan entre los postes de la ciudad también son apetecidos por los delincuentes.
Esta semana se viralizó un video en el que se observa a un hombre escalando un poste donde había un semáforo, en la avenida 25 de Julio. Ante la atónita mirada de los transeúntes, cortó los cables con un cuchillo. El sujeto huyó del sitio, pero personal municipal logró arreglar el semáforo.
Vera indica que los cables robados son de telefonía, pero también de electricidad. Asegura que se reciben hasta dos denuncias al día por este delito y los sectores más afectados son donde hay regeneración urbana.
Fue precisamente el robo de un transformador y de cables lo que dejó a oscuras semanas atrás el puente que conecta Guayaquil con Daule, a la altura de La Joya.
Para evitar futuros atracos en este sector, se instaló un transformador reforzado con estructura metálica y bolardos de hormigón, además se elevaron los cables para evitar que los pillos los alcancen.