Barbie

Carlos José Jijón

Guayaquil, Ecuador

¿Sabías que han habido 42 películas basadas en la muñeca Barbie? No estoy bromeando. ¡42 películas! Pero es todavía más extraño que ninguna de ellas haya sido en acción real. Desde el punto de vista de una empresa, parece una idea bastante obvia. Las grandes producciones de Hollywood ganan mucho más dinero que las cintas animadas para televisión. ¿Por qué es recién en 2023 que tenemos una película con actores reales basada en Barbie? Bueno, yo tengo una teoría. La propiedad es tan grande que todas las personas a las que se les ofreció el trabajo inmediatamente colapsaron bajo la presión. 

Solo imagina lo difícil que debe ser producir una película de Barbie. Es una de las marcas más queridas del Universo. Atrévete a escoger una actriz que no esté a la altura del papel y tendrás a gente tratando de quemar tu casa (o por lo menos diciendo cosas muy feas sobre ti en Twitter). Afortunadamente, las personas detrás de la más reciente versión cinemática de Barbie supieron cómo resolver este problema. Al contratar a Margot Robbie y a Ryan Gosling, las dos estrellas de cine rubias más famosas y queridas del planeta, en los papeles principales, se ganaron la aprobación de la sociedad y (por si no te habías enterado) el producto final ha sido bastante exitoso.

Hay mucho que decir acerca de esta nueva versión de Barbie. En mi mente hay dos formas de ver a la muñeca. Uno es pensar en ella como un juguete divertido con ropa bonita que representa ideas relacionadas a la niñez y la inocencia. Transmitiendo estos sentimientos, la película brilla. La historia se ambienta en un mundo fantástico en el que las muñecas Barbie viven juntas y se divierten haciendo fiestas, bailando, y yendo a la playa. Es una celebración de la marca repleta de nostalgia que se siente deslumbrante gracias a la excelente dirección de Greta Gerwig. Solo el diseño de producción es espectacular. Las muñecas viven en un colorido ambiente de plástico y todo está basado en verdaderos juguetes de Barbie, lo que hace que te puedas pasar un buen rato solo apreciando los detalles. El primer acto de la película, que se concentra principalmente en este aspecto, es por mucho mi favorito.

Pero luego está el otro elemento de Barbie. Por supuesto, Barbie no es solo una línea de muñecas; es también el objeto de miles de controversias y discusiones culturales. Para algunas personas, Barbie es un símbolo de empoderamiento femenino. Para otros, es un producto dañino que refuerza ideas anticuadas sobre el género y amenaza los esfuerzos de igualdad de género en todo el mundo. ¿Tienen mérito estas ideas? Yo personalmente creo que no, pero parece que los productores de la película están en desacuerdo. Barbie de Greta Gerwig es una película con muchas ideas, quizá demasiadas. Es una cinta sobre el feminismo, el machismo, el consumismo, el patriarcado, el miedo a envejecer y a la muerte, la búsqueda de la perfección, y muchas, muchas cosas más. 

Los cineastas claramente tienen mucho que decir, pero la película solo dura dos horas. Eso no es tiempo suficiente para hacerle justicia a todos los temas diferentes que el filme quiere tratar. Hay tantos mensajes – muchos de ellos contradictorios – que es difícil descifrar cuál exactamente es la moraleja con la que me debería quedar. Y es algo triste considerando que la película le está dedicando bastante esfuerzo a explorar estas ideas, esfuerzo que está visiblemente ausente en otras partes de la producción como, digamos, la trama.

A lo largo del metraje, Barbie trata a su trama con un casi total desinterés. La historia está llena de conveniencias y personajes inconsistentes. Hay al menos dos ocasiones en las que un personaje cambia totalmente su actitud de un minuto a otro sin razón aparente, algunas veces cambiando drásticamente el rumbo de la narrativa. Supongo que no es la preocupación principal de los cineastas, pero el resultado es una película en la que no hay ningún tipo de tensión ni suspenso. Siendo justos, hay algunas sorpresas interesantes y la cinta tiene un buen ritmo que impide que las cosas se pongan aburridas, pero no me imagino a nadie elogiando a Barbie por su narrativa sobrecogedora o personajes profundos porque simplemente no están ahí.  

El triunfo estético de Barbie es innegable y de verdad admiro la imaginación y destreza cinematográfica presentes. Pero el mensaje confuso, el humor que no siempre funciona, y la historia que nadie se toma en serio son manchas en lo que de lo contrario sería un proyecto muy original e interesante. Aunque, bueno, supongo que una película que tiene demasiadas ideas no es lo peor del mundo. Al menos no fue como esa adaptación de Super Mario Bros. que se estrenó hace unos meses en la que podías encontrar bonita animación, recuerdos nostálgicos, y absolutamente nada más. (O)

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