
Raúl Andrade Gándara
Rochester, Estados Unidos
Desde hace varios años, y allí están mis escritos para comprobarlo, he planteado la necesidad de un acuerdo nacional contra los males que nos azotan como País :
La corrupción, el individualismo, la insensibilidad, la narco política, la fractura social son temas que no pueden entregarse a una persona sin que exista un acuerdo mínimo con respecto a cómo enfrentarlos.
El asesinato de Fernando Villavicencio desnuda, una vez más, la fragilidad de los hombres frente a estas terribles tentaciones.
Es más sencillo callar a quien estorba que aceptar un clamor nacional.
Demasiados intereses en juego nublan la visión.
Ante la fatalidad, escucho finalmente a algunos candidatos hablar de acuerdos, de diálogo y de apertura.
El mejor homenaje a la memoria de este hombre valiente es que el resto de candidatos plasme en un acuerdo esta necesidad urgente de lograr la paz.
Muchos países, a través de la historia, han sufrido la pérdida irreparable de quienes han intentado enfrentar a los demonios de la conveniencia y la corrupción.
La diferencia está en las decisiones que el pueblo, hastiado, ha apoyado para lograr un cambio efectivo en la forma de hacer política y ejercer el poder.
Ojalá entendamos esta dolorosa lección y el sacrificio de Fernando Villavicencio no sea en vano.