El precio del barril de petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este martes con una subida del 1,75 %, hasta 93,23 dólares el barril, un precio que no se veía desde verano del año pasado.
A las 09:00 hora local (13:00 GMT), los contratos de futuros del WTI para entrega en octubre ganaban 1,75 dólares con respecto al cierre de la jornada previa.
El precio del crudo estadounidense ha subido un 18 % desde agosto.
Ayer, la Administración de Información Energética (EIA) de Estados Unidos dijo que la producción de oro negro del país está en camino de caer a 9,393 millones de barriles por día en octubre, el nivel más bajo desde mayo de 2023.
Los analistas coinciden en que la reducción de la producción de Arabia Saudí y Rusia, que ahora se mantendrá hasta diciembre, es el principal factor alcista, y de hecho la Agencia Internacional de Energía no prevé bajadas en los precios hasta diciembre.
Precios inestables
Arabia Saudí dijo el lunes que los mercados energéticos internacionales necesitan una regulación ligera para limitar la volatilidad.
No obstante, Tom Essaye indica este martes en su informe de The Sevens Report que el precio del crudo se ha vuelto «considerablemente sobre comprado».
«Una retirada de la toma de ganancias no debería ser una sorpresa en las próximas sesiones. La tendencia del petróleo es decididamente alcista en estos momentos, dejando la senda de menor resistencia al alza. Sin embargo, el mercado sigue siendo susceptible a una reversión en medio de cualquier evidencia de un aterrizaje económico brusco y riesgos crecientes de recesión», concluye el experto.
Por otro lado, el banco central estadounidense celebrará una reunión de dos días a partir del 19 de septiembre y anunciará al día siguiente su decisión sobre si subir o no las tasas de interés, lo que podría afectar a los mercados. EFE