Estados Unidos no piensa apoyar el llamamiento a actuar en Oriente Medio que el secretario general, António Guterres, hizo este viernes de manera dramática al Consejo de Seguridad, según dejó claro ante el Consejo su representante ante la ONU, Robert Wood.
Wood arrojó así un jarro de agua fría a las expectativas de que hoy el Consejo apruebe ese llamamiento a la tregua permanente, en una resolución presentada por Emiratos Árabes y que ha recibido el apoyo de todos los países árabes e islámicos, además de Rusia, China y Francia.
«No apoyamos el llamamiento a un alto el fuego inmediato. Solo sembraría las semillas de una próxima guerra, porque Hamás no quiere ni una paz duradera ni la solución de los dos Estados», dijo Wood en el Consejo.
Wood razonó, repitiendo las tesis israelíes, que «si Israel dejara las armas hoy, como algunos Estados miembros piden, Hamás seguiría reteniendo a sus rehenes, mujeres y niños, viejos y jóvenes, muchos de ellos sujetos a trato inhumano y cruel».
Poco antes de que Wood hablara, ya el embajador israelí, Gilad Erdan, se opuso radicalmente a una tregua y dijo que «el verdadero camino a la paz es apoyar la misión de Israel y no llamar en absoluto al alto el fuego».
Israel dice que alto al fuego favorece a Hamás
El embajador, conocido en las últimas semanas por sus agresivos discursos contra distintas instancias de la ONU, razonó así su oposición a la tregua: «Un alto el fuego significa cimentar el control que Hamás tiene en Gaza; más aún, llamar al alto el fuego manda un mensaje claro de que se perdonan sus atrocidades deliberadas, y que la opresión de los gazatíes por Hamás tiene luz verde de la comunidad internacional».
El discurso de Erdan, como es habitual, consistió en culpar a Hamás de todo lo que sucede en Gaza, y hoy aseguró que sus militantes han acaparado la escasa ayuda humanitaria que entra en la Franja y que han llegado a disparar contra los civiles gazatíes que tratan de acceder a esa ayuda.
Llegó a asegurar, contra lo que afirman todas las agencias humanitarias, que «de hecho, Israel acepta toda ayuda humanitaria a Gaza, de cualquier país que desee prestarla», pero que esa ayuda no llega a sus verdaderos destinatarios.
El mensaje de Erdan iba dirigido a los 15 miembros del Consejo en horas previas a que voten una nueva resolución, presentada por Emiratos Árabes, y que pide un alto el fuego sin condiciones, aunque el embajador francés ante la ONU, Nicolas de la Rivière, ya advirtió este viernes que no le parecía realista que ese texto pueda aprobarse hoy, y las palabras de Wood hacen pensar que una votación así está condenada al fracaso.
Estados Unidos, principal aliado de Israel, se ha mostrado crítico con su aliado por el hecho de que los ataques en Gaza no toman en cuenta la protección de los civiles, sin por ello pedir el alto el fuego.
Consejo de Seguridad
En los dos meses de guerra, el Consejo de Seguridad ha votado en varias ocasiones otras resoluciones para pedir el fin de la guerra, con vetos cruzados de Estados Unidos y de Rusia, y solo el pasado 15 de noviembre logró consensuar un llamamiento a «pausas humanitarias» para entregar ayuda a la población civil de Gaza.
Sin embargo, la única tregua declarada en estos dos meses (de siete días) no fue fruto de esa resolución, sino de negociaciones indirectas entre Israel y Hamás -con mediación de Catar y EE.UU.– para intercambiar rehenes en manos de Hamás por presos palestinos en cárceles israelíes. EFE (I)