Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ofreció al presidente Daniel Noboa asesoría en seguridad para controlar la ola de violencia que azota al Ecuador, donde rige la declaratoria de conflicto armado interno tras hechos violentos de grupos terroristas en calles y prisiones.
«Presidente Noboa, si quiere tener un sistema de seguridad y un sistema penitenciario, búsquenos a nosotros, no busque al Comando Sur. El Comando Sur (de Estados Unidos) lo que va a hacer es intervencionismo, colonialismo», sugirió al presidente durante su mensaje desde la Asamblea Nacional, el 15 de enero de este año.
Maduro dice que «crear caos en los países» de la región, utilizando a grupos criminales, es una «nueva estrategia» con la que Estados Unidos pretende «ocupar con el Comando Sur» estos territorios. A su parecer, cualquier intento de poner bases militares del país norteamericano en Latinoamérica representa una violencia a la soberanía regional y «un error histórico», pues «no soluciona el problema».
Violencia en Ecuador
La semana anterior, 8 al 14 de enero, el país atravesó una ola de actos violentos que incluyó la toma temporal de un canal de televisión por parte de un grupo armado en Guayaquil, automóviles incendiados, amenazas en instituciones privadas y públicas. Los incidentes empezaron tras la fuga de José Adolfo Macías, alias ‘Fito’, cabecilla de Los Choneros.
A manera de respuesta, Noboa dispuso el estado de excepción en todo el Ecuador por sesenta días y, 24 horas después, declaró un conflicto armado interno para autorizar la movilización e intervención inmediata de las fuerzas de seguridad contra 22 grupos terroristas.
Así mismo, se intervinieron toda las prisiones del Ecuador, donde se producían amotinamientos y se han escapado varios presos, entre ellos Fabricio Colón Pico, cabecillas de Los Lobos y señalado como «una amenaza potencial» para la fiscal general del Estado, Diana Salazar.
Maduro dijo que en su país pretendían «un método parecido al de Ecuador». Esto desde las siete prisiones que recientemente fueron tomadas por las fuerzas de seguridad del Estado, en medio de un plan gubernamental para desmantelar estructuras criminales que operan en estos centros.
De acuerdo con Teleamazonas, en estos operativos, las autoridades de Venezuela confiscaron 605 armas de fuego, 862 armas blancas y 399 587 municiones, según el balance oficial. Y también se habla de la recuperación de 4 015 espacios dentro de estos centros y del traslado de más de 8 000 privados de libertad a otras cárceles.
No obstante, también en los operativos se dio a saber la fuga de Héctor Guerrero, alias ‘Niño Guerrero’, cabecilla del Tren de Aragua. Situación que encendió las alarmas de Sudamérica por su posible entrada a otros países.