Los ministros de Justicia de la Unión Europea debatieron este viernes las medidas que buscan adoptar para combatir la delincuencia organizada, incluida la creación de una alianza de fiscales especializados.
Ese fue el tema principal de la reunión informal de ministros de Justicia, explicó al término el ministro belga, Paul Van Tigchelt, cuyo país preside el Consejo de la Unión Europea este semestre.
Bélgica, que a través del puerto de Amberes se ha convertido en la puerta de entrada de la cocaína en Europa, está poniendo mucho énfasis en la manera de combatir esas mafias.
Van Tigchelt explicó que hay tres medidas que la Unión Europea quiere poner en marcha, empezando por la mejora de la protección de los puertos.
«Queremos hacer imposible sacar la cocaína de los puertos», tanto en el de Amberes como en el resto y «crear una situación equivalente» en toda Europa, dijo el ministro.
Precisamente esta misma semana la Unión Europea lanzó una alianza de puertos europeos, que busca una mayor cooperación y el intercambio de prácticas para proteger mejor esas infraestructuras.
En segundo lugar, la organización quiere redoblar los esfuerzos para llevar ante la Justicia a los responsables del tráfico de drogas, también colaborando con terceros países, dijo el ministro belga.
Por último, el objetivo es formar una red de fiscales especializados, con la ayuda de Eurojust y Europol y llevar esta lucha a nivel global dada la escala del problema.
En el almuerzo de los ministros, se habló de la descriminalización de la prostitución, algo que, según Van Tigchelt es «sensible y sobre lo que existen distintas opiniones en Europa».
En la reunión se encontró al menos, dijo, «un terreno común» en la necesidad de asegurar el respeto de los derechos humanos.
Por último, la cita informal sirvió para abordar la situación de los pequeños centros de detención.
Según Bélgica, que tiene algunos establecimientos de este tipo, son «un ejemplo interesante de cómo la detención a pequeña escala se centra en rehabilitar y empoderar a los detenidos para facilitar su reinserción en la sociedad y disminuir el riesgo de reincidencia». EFE (I)