Servir a la Patria

Alberto Molina Flores

Guayaquil, Ecuador

El servicio militar históricamente constituía una contribución obligatoria a la defensa nacional. El 3 de abril de 1837, el Congreso expidió la Ley sobre Conscripción del Ejército, el Art.1, establecía que “Todo ecuatoriano desde la edad de veinte a veinticinco años cumplidos será alistado para el servicio de las armas”. En nuestro país, el servicio militar siempre fue obligatorio. Después del año de conscripción pasaba a pertenecer a las Fuerzas Armadas permanentes, con licencia durante 5 años y luego, a las reservas hasta cumplir los 55 años de edad.

En el Ecuador hasta antes de 2008 existían alrededor de 120 mil ciudadanos en edad de servicio militar, de los cuales sólo eran reclutados entre 20 y 25 mil. De acuerdo a la Constitución vigente, el servicio militar es voluntario. Los ciudadanos, normalmente de los estratos más pobres, acuden al acuartelamiento, unos por vocación, con la aspiración de seguir la carrera militar y otros como una alternativa a la falta de trabajo.

Rafael Correa, en una de las sabatinas dijo que tenía la “percepción” de que el servicio militar en nuestro país “era tremendamente ineficiente” y que “tal vez para eso no se necesita 1 año, sino 2 o 3 meses y entrenamiento permanente”. Javier Ponce cuando fungía de Ministro de Defensa, señaló: “mi idea es ampliar la conscripción voluntaria a 2 o 3 años”; de estas declaraciones podríamos “percibir” que ni uno ni otro sabían de que hablaban; en todo caso, Correa decidió que el servicio militar se limite a 6 meses y que de 16.000 conscriptos que se reclutaban, se reduzca a 10 mil, debilitando a las reservas de las Fuerzas Armadas.

Durante el año de conscripción, el ciudadano no sólo recibía entrenamiento para que pudiera enfrentar los rigores de la vida militar, sino que recibía una formación integral, se le inculcaba el amor a la patria y valores cívicos; hábitos de higiene, de disciplina, de responsabilidad; además, aprendía un oficio. Estos ciudadanos al cumplir su deber con la patria, salían del cuartel con otra visión, sintiéndose más útiles para emprender nuevos desafios en su vida.

Como un incentivo para quienes hayan hecho el servicio militar, hombres y mujeres, deberían tener prioridad para ingresar a las Fuerzas Armadas, Polícia, Aduanas, Tránsito, Bomberos, Guardias forestales y penitenciarios, etc.

Todos los jóvenes ecuatorianos, hombres y mujeres, tienen una obligación para con su patria; ¿Por qué sólo los médicos deben cumplir con un año de medicinal rural? se debería extender esta obligación a todos los profesionales como requisito para que puedan ejercer su profesión, de esta forma estos profesionales conocerían la realidad del país y se verían comprometidos con su patria. Igual se debería volver a la premilitar para los estudiantes, hombres y mujeres, de último año de secundaria; para aquellos estudiantes universitarios con vocación militar pero que no quieren seguir la carrera podrían optar los cursos para oficiales de reserva.

Un tema para el analisis del gobierno y para que los asambleístas elaboren las leyes correspondientes que permitan a los jóvenes reencontrarse con su patria y sus valores.

Más relacionadas