La oposición nacionalista macedonia lidera con claridad el recuento de las elecciones legislativas y presidenciales celebradas este miércoles en Macedonia del Norte, cuya vuelta al poder podría dificultar el camino de la pobre nación balcánica hacia la Unión Europea.
Con el 64,79 % de los votos escrutados en segunda vuelta de las presidenciales, la derechista Gordana Siljanovska-Davkova, del partido opositor VMRO-DPMNE, encabeza los resultados con el 64,13 % de los sufragios, por delante del 29,59 % en favor de Stevo Pendarovksi, actual presidente y candidato del gobernante partido socialdemócrata SDSM.
En las legislativas, con el 62,18 % escrutado, VMRO-DPMNE obtiene el 40,27 %, el gubernamental SDSM suma el 13,72 % y la principal formación de la minoría albanesa, DUI, obtiene el 16,41 %.
El regreso al poder de la oposición de derechas en la nación balcánica de 1,8 millones puede avivar las tensiones con Grecia y Bulgaria, país este último que bloquea por cuestiones etnolingüísticas las negociaciones de adhesión de Macedonia del Norte a la Unión Europea.
El ingreso a la Unión Europea
El accidentado camino hacia la UE de Macedonia del Norte comenzó en 2005, cuando recibió el estatus de país candidato, pero estuvo bloqueado durante años por Grecia debido a una disputa sobre el nombre del país. Esta se resolvió en 2018 cuando la nación balcánica añadió «Norte» a su nombre.
Ese acuerdo fue muy criticado por los nacionalistas y el líder del VMRO-DPMNE, Hristijan Mickoski, se niega a reconocer el nuevo nombre oficial, lo que puede reavivar las tensiones con Atenas.
Además, ha prometido firmeza con Bulgaria, país que bloquea desde hace dos años las conversaciones de adhesión a la Unión Europea hasta que Skopje reconozca la existencia de una pequeña minoría búlgara en el país.
De confirmarse la victoria del VMRO-DPMNE en las elecciones parlamentarias, Mickoski será, probablemente, el próximo primer ministro del país.
Mickoski reconstruyó el partido desde que tomara las riendas en 2017, año en el que huyó su exlíder y exprimer ministro Nikola Gruevski, acusado de corrupción y que ha obtenido el estatus de refugiado político en la Hungría del ultranacionalista Viktor Orban.
Mickoski, conocido por sus proclamas populistas, puso el acento en la economía durante la campaña, un mensaje que llegó en un país donde el salario medio es de 630 euros y que ha perdido al 10 % de su población debido a la emigración.
El líder del VMRO-DPMNE también ha usado una retórica cada vez más agresiva contra el DUI, el mayor partido albanés del país, generando tensiones en un país donde el 24 % de la población es de etnia albanesa.
En 2001, la OTAN evitó que Macedonia del Norte cayera en un conflicto civil durante una rebelión armada albanesa y prometió una integración más rápida en las estructuras euroatlánticas. El país ingresó en la OTAN en 2020 pero la entrada en la UE todavía queda lejos.
El gobierno socialdemócrata del SDSM consiguió un histórico acuerdo con Grecia para solventar una disputa por el nombre del país y logró que las negociaciones de adhesión se lanzaran en 2022, pero fueron bloqueadas por Bulgaria.
Este país exige que haya una mención de la minoría búlgara en la Constitución a cambio de su luz verde para el avance macedonio hacia el club comunitario.
La profunda división entre los dos principales partidos sobre la solución del problema con Bulgaria impide lograr un consenso en el Parlamento nacional.
El Gobierno del SDSM aceptó la condición búlgara para lograr un rápido acercamiento a la UE, pero el VMRO-DPMNE exige garantías de que Bulgaria no imponga nuevos obstáculos a Macedonia del Norte. EFE (I)