Un hombre prendió fuego a un local comercial y una residencia en las calles 25 y la L, en el suburbio de Guayaquil, el pasado 24 de junio.
Los residentes de ese inmueble atravesaron minutos de desesperación. Una cámara de celular grabó cuando, desde el balcón, un niño tuvo que arrojarse para huir de las llamas, y cayó sobre el pavimento. Poco después, le sigue una mujer.
Uno de los afectados dice que se trata de un ataque por venganza. Acusa a un extranjero a quien le dieron posada por tres meses para que efectúe un trabajo.
«Estaba haciendo una obra aquí en la casa. Pero llegó un momento en el que ya no trabajaba, y quería vivir en el departamento sin pagar nada», contó una de las víctimas del ataque.
Cámaras de seguridad grabaron los instantes previos en los que se ve a un hombre analizando la escena, para después procede a rociar combustible y prender la vivienda.
«Quería que una hermana mía le pague un dinero, pero su trabajo estaba pagado. Vino esta semana a dar vuelta, pero nunca pensamos esto», añadió el afectado.
Según Ecuavisa, el lugar donde funcionaba un local de accesorios de celulares quedó destruido. Los familiares solicitan que se localice al responsable, porque aunque el niño de diez años sobrevivió a la caída, permanece hospitalizado, en terapia intensiva.