
Tras la firma del decreto 560, el Gobierno de Daniel Noboa, emitió las nuevas disposiciones sobre la regularización migratoria de ciudadanos venezolanos. El documento menciona que la medida responde a la suspensión y recorte de financiamiento internacional para programas de apoyo en esta materia.
Pues, la mayoría de recursos estaban canalizados a través de organismos como la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), permitían la ejecución del proceso de regularización migratoria.
El decreto señala que el Estatuto Migratorio entre Ecuador y Venezuela seguirá vigente, aunque se modificarán ciertos procedimientos. Los ciudadanos venezolanos que deseen ingresar o permanecer en el país deberán cumplir con los requisitos establecidos en el documento.
El gobierno argumenta que la reducción de financiamiento internacional afecta directamente la capacidad de Ecuador para sostener el proceso de regularización.
Los recursos destinados a estos programas provenían principalmente de organismos multilaterales. La suspensión de fondos ha generado dificultades en la implementación de medidas de apoyo a los migrantes.
Las autoridades manifestaron la necesidad de buscar alternativas para garantizar la regularización ordenada de la población venezolana en Ecuador. El país también explorará opciones para obtener nuevos mecanismos de financiamiento.