El ITAE esperará depósito de fondos para volver a clases

El Instituto Tecnológico y de Artes del Ecuador (ITAE) retomará sus horarios regulares de estudios cuando se haga el depósito ofrecido por el Senescyt.

En una nota de diario El Comercio Bertha Díaz explica la situación del ITAE: Unos jóvenes cierran la intersección de Quito y Bolivia, al sur de Guayaquil, con un cartel que dice ITAE. El tránsito se irrumpe y los protagonistas del acto, estudiantes del Instituto Tecnológico de Artes del Ecuador, se toman una foto que inicia una serie de intervenciones en el espacio público, realizadas esta semana. Estas acciones se han dado frente al resurgimiento de una problemática: económica, en la superficie, e ideológica, en el trasfondo; con la que ha lidiado históricamente esta institución.

Esta vez, el lío de los fondos responde a una ralentización del proceso de transición a convertirse en público, de este organismo que nació como autónomo y que ha vivido un peregrinaje institucional para sobrevivir. En abril último, la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (Senascyt) había firmado un convenio con el ITAE para garantizar el presupuesto que viabilizase la transición. Sin embargo, a cuatro meses de tal encuentro sin concreción, lo que impide que esta maquinaria transgresora del orden ético-estético de la ciudad se mantenga hábil, la crisis estalla.

¿Cómo atravesar el aprieto y comprometer seriamente al Estado?, se preguntan l@s alumn@s del ITAE. Y se responden: posponiendo las clases regulares y saliendo a las calles. Durante la semana, sitios como las afueras el Ministerio del Litoral y la Plaza San Francisco se han convertido en escenarios para generar performances, intervenciones, sesiones abiertas de reflexión, con las que se mantiene potente la premisa de Robert Filiou: “el arte es lo que hace la vida más interesante que el arte”.

Lo que se ha defendido no es solo la plaza laboral de un@s cuant@s y el lugar de estudio de otr@s tant@s, sino un sitio que ha permitido el encuentro ideo-estético de personas ansiosas de multiplicar las inquietudes y replantear los paradigmas. En sus propuestas, l@s estudiantes han revelado un expansivo estado de ánimo que ha potenciado el sentido de la entidad.

El Gobierno respondió y el viernes último se mantuvo una reunión abierta con delegados de Senescyt y de Senplades. Los fondos -prometen los funcionarios- se transferirán en 15 días. En la espera, las clases se retoman, pero no se afloja el ideal… Y, claro, la actitud de persistencia no se apagará cuando los fondos lleguen, sino que se mantendrá latente como un acto de resistencia, que es desde donde la verdadera posibilidad de la creación surge.