El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, protagonizaron el viernes una de las anécdotas de la recepción celebrada en el Palacio Real de España con motivo de la Día de la Hispanidad. Ambos encabezaban la fila de invitados y saludaron a los Reyes. Fue entonces cuando se detuvieron, y empezaron a saludar a los invitados, junto a los reyes de España, Felipe y Letizia.
La confusión se ha viralizado en las redes sociales. El propósito, según fuentes de la Casa del Rey, era compensar el vacío que se producía en la fila, en la que a unos metros de distancia les seguía la presidenta del Congreso, Ana Pastor. Pero Sánchez, que acudía por primera vez como presidente del Gobierno, interpretó que debía detenerse y se situó al lado de los Reyes, dando la sensación de que también tuviera que saludar a los invitados y creando una situación insólita. La anomalía fue resuelta por uno de los encargados de protocolo, que les indicó que debían retirarse de al lado de los Reyes para que la fila siguiera su curso.
En conversación informal con los periodistas, Pedro Sánchez ha quitado importancia a la confusión y ha asegurado que no había hecho más que seguir las indicaciones del personal de la Casa del Rey, como confirmaron después fuentes de La Zarzuela. Por su parte, fuentes de La Moncloa han negado que el presidente tuviera ninguna intención de alterar el protocolo.
Sin duda, lo mejor de este Día de la Hispanidad. Los 10 segundos durante los que Pedro Sánchez y su esposa se creyeron Reyes de España. Error garrafal de protocolo. pic.twitter.com/g4IxzZq7jH
— Israel Remuiñán (@israelremuinan) 12 de octubre de 2018