El presidente de Francia, François Hollande, condicionó el hipotético envío de armas a Siria a cambio de tener la certeza de que ese armamento llegue a los opositores «legítimos» del régimen de Bachar al Asad.
Los representantes de los Veintisiete habían discutido la semana pasada las repetidas peticiones de Francia y el Reino Unido para levantar el embargo de armas europeo a Siria y permitir que se suministren equipos militares a la oposición, pero descartaron esa idea en favor de que la solución sea político.
En estos dos años de conflicto, según Hollande, «ha habido más de 100.000 muertos en Siria, 100.000, con una guerra civil que se radicaliza y yihadistas que aprovechan esta oportunidad para golpear a Al Asad y al mismo tiempo tomar sitio para el futuro».
El presidente galo, en una entrevista concedida a la principal cadena pública, «France 2», aseguró hoy que respeta el embargo existente, pero se mostró partidario de que cuando venza en mayo el régimen de sanciones y se deba renovar entonces la política al respecto, se contemple esa posibilidad.
«No pueden entregarse armas cuando acabe el embargo si no se tiene la certeza de que esas armas serán utilizadas por opositores legítimos«, precisó Hollande, no sin defender esa vía cuando se pueda confirmar que «la oposición tiene un control total de la situación». EFE