MADRID (AP) — El jefe de gobierno español Mariano Rajoy rechazó el viernes la oferta que el rey Felipe VI le hizo de intentar formar un nuevo gobierno tras las elecciones del mes pasado, pero dijo que él seguirá buscando apoyo para su candidatura.
Se requiere más tiempo para negociaciones, señaló Rajoy, e indicó que para él no tiene sentido que se presente en este momento porque la inmensa mayoría de los diputados seguramente votarían en su contra en el Parlamento.
Rajoy dijo que no ha renunciado a nada tras reunirse con Felipe VI al final de una semana de pláticas entre el rey y líderes partidistas. El jefe de gobierno, que en estos momentos se mantiene en el puesto en forma interina, agregó que le dijo al rey que aún carece de apoyo suficiente.
El Partido Popular de Rajoy ganó 123 escaños en los comicios del 20 de diciembre, una cifra superior a la de cualquier otro grupo, pero insuficiente para obtener una mayoría en la cámara de diputados del Parlamento, de 350 escaños. Además estuvo muy por debajo de las 186 bancas que tuvo después de la elección general previa realizada en 2011.
El rey Felipe podría ahora convocar al líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez. Los socialistas ocuparon el segundo lugar en la elección con 90 escaños y parecen tener más posibilidades de recolectar apoyo de otros grupos en el Parlamento.
En un comunicado, el Palacio de la Moncloa indicó que el monarca comenzará una nueva ronda de conversaciones con los líderes el miércoles en un intento por encontrar otro candidato.
El candidato nominado debe ganar un voto de confianza en el Parlamento. Si ningún líder partidista consigue obtener el apoyo de los legisladores en dos meses después de la primera votación, se deben realizar elecciones nuevas.
Durante semanas, Rajoy ha buscado conducir un gobierno de minoría con el apoyo de los socialistas y del nuevo partido de centro-derecha Ciudadanos, que ganó 40 escaños. Pero los socialistas han dicho que tienen la intención de votar contra él sin importar qué ocurra.
En contraste, Sánchez recibió el viernes temprano una oferta del partido de izquierda Podemos para formar un gobierno de coalición. Sánchez dijo que Rajoy debe tener la primera oportunidad de formar un gobierno, pero que los socialistas intentarán hacerlo si él fracasa.
Pablo Iglesias, líder de Podemos, dijo que quiere que los socialistas y el más pequeño Izquierda Unida construyan un «gobierno de cambio», con puestos en el gabinete asignados en concordancia con los resultados de la elección de diciembre. Iglesias sugirió que él podría ser vicepresidente en un gobierno encabezado por Sánchez.
El partido Podemos y sus aliados ocuparon el tercer lugar en la elección con 69 escaños; Izquierda Unida tiene dos.
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Por CIARAN GILES y BARRY HATTON, Associated Press. Hatton contribuyó desde Lisboa, Portugal.