Perú y Cuba suscribirán un acuerdo para que una brigada de 85 profesionales de la salud cubanos se sumen en los próximos días a la lucha contra la epidemia de COVID-19 en el país andino, informó este sábado la Presidencia del Consejo de Ministros.
Según la información oficial, los ministerios de Salud de ambos países suscribirán un Memorando de Entendimiento que permitirá que la brigada humanitaria cubana, conformada por médicos y enfermeras, sea enviada a establecimientos de salud de las regiones más afectadas por la COVID-19 en Perú.
El país andino afronta uno de los más fuertes embates de la epidemia en Latinoamérica, ya que hasta el momento ha sumado 88.541 casos y 2.523 fallecidos, a pesar de mantener una dura cuarentena desde hace más de 60 días.
La PCM detalló que los especialistas cubanos «apoyarán los esfuerzos para enfrentar la pandemia» bajo la supervisión de autoridades peruanas, gracias a un acuerdo impulsado por la Comisión Multisectorial de Alto Nivel contra el Coronavirus, que se reúne de manera permanente con autoridades locales y regionales.
Agregó que la brigada llegaría la próxima semana «con la documentación que acredite sus capacidades, debidamente validada por sus autoridades» y el Ministerio de Salud tramitará las autorizaciones para que puedan ejercer su profesión en el país.
El acuerdo tendrá una vigencia de tres meses desde su suscripción y podrá ser renovado si las partes lo consideran necesario.
Las autoridades peruanas señalan que aunque se mantiene un promedio de 4.000 nuevos casos y unos 100 fallecidos diarios la epidemia ha alcanzado una meseta en el país por lo que en los próximos días comenzará un lento descenso de la enfermedad.
Aunque las medidas estrictas de la cuarentena, que comenzó el pasado 16 de marzo, culminarán el próximo 24 de mayo, el presidente Martín Vizcarra anunció este sábado que se mantendrán muchas de las restricciones y medidas de seguridad sanitaria.
Vizcarra aseguró que «no pueden haber» actividades que generen aglomeraciones, por lo que seguirán prohibidas las clases presenciales en escuelas y universidades, la atención en los restaurantes y la apertura de cines y locales nocturnos.
«Todo lo que genera aglomeraciones no va a poder funcionar durante varios meses», remarcó antes de agregar que «inclusive» seguirá la restricción en la circulación nocturna de los ciudadanos, en alusión al toque de queda que rige desde las 20:00 horas.
El gobernante dijo que el Ejecutivo va «a seguir evaluando» durante los próximos días todos los detalles de las restricciones y cambios que se aplicarán para el control de la enfermedad. EFE (I)