
¿Una nueva Constitución para destruir la CIDH en Ecuador?
Según el artículo 1 de la Constitución, el Ecuador es, como lo ha venido siendo desde hace mucho, un Estado soberano, y su soberanía radica en el pueblo, cuya voluntad es el fundamento de la autoridad. Y según el Preámbulo de esa Constitución, fue “el pueblo soberano del Ecuador” el que, en ejercicio de esa “soberanía”, se dio a sí mismo esa Carta Fundamental, con todas las declaraciones, principios, derechos, obligaciones, garantías, atribuciones y limitaciones que contiene, concede, reconoce o impone. Por consiguiente, gústenos o no, esa Constitución de Montecristi está vigente y nos obliga soberanamente a todos, gobernantes y gobernados, desde su publicación oficial efectuada el 20 de octubre del 2008.