Masacre en Texas. 27 muertos, 24 heridos

Elementos del orden público trabajan en la escena de un tiroteo en la primera iglesia bautista de la localidad de Sutherland Springs, Texas, el domingo 5 de noviembre de 2017. (Nick Wagner/Austin American-Statesman vía AP

Miami, 5 nov (EFE).- Al menos 27 muertos y dos docenas de heridos es el saldo provisional del tiroteo en un iglesia baptista de Texas (EE.UU.) iniciado hoy por una persona sin identificar, a quien la Policía ha reportado como muerta, informaron medios locales.

El incidente ocurrió en un templo de Sutherland Springs, a 45 kilómetros al sureste de San Antonio (Texas), en donde se reporta una fuerte presencia policial tras los hechos, incluido el FBI.

Aunque la Policía local aún no da cifras de fallecidos, el comisionado del Condado Wilson Albert Gamez Jr. ha señalado a la cadena MSNBC que la cifra de muertos asciende a 27 personas y por lo menos a 24 los heridos.

El autor de los disparos, identificado por varios medios como Devin Kelley, un hombre blanco de 26 años, murió después de enlutar a la población de Sutherland Springs, de menos de 500 habitantes. Se desconoce por ahora si pereció por disparos de la policía o se quitó la vida, de acuerdo con el portavoz de la Oficina del Alguacil del Condado Guadalupe, Robert Murphy.

El autor del tiroteo escapó del lugar en su automóvil, el cual pudo verse en imágenes de televisión en medio de un campo y con varios agentes y peritos policiales trabajando a su alrededor. Fue perseguido por la policía hasta ese lugar, situado según el canal KSAT a 11 millas (17 km) de la localidad, que está situada a 30 millas (45 kilómetros) de San Antonio.

Hasta ahora eso todo lo que se sabe del tirador, además de que aparentemente usó un rifle de asalto semiautomático, según los vecinos que escucharon los disparos desde fuera del templo.

Un testigo dijo a KSAT12 que sobre las 11.30 hora local (17.30 GMT) un hombre armado ingresó a la iglesia y abrió fuego contra los que se hallaban en el templo.

Otro testigo, un cajero en una gasolinera al otro lado de la calle del templo, señaló a la cadena CNN que escuchó unos 20 disparos «en rápida sucesión mientras se realizaba un servicio religioso».

«Estamos en shock», manifestó a Univision el representante demócrata por Texas Vicente González, quien subrayó que Sutherland Springs es una pequeña localidad de «gente buena» donde nunca había pasado nada parecido.

González dijo que le comentaron que fue alguien de fuera de la comunidad, pero oficialmente no se sabe nada todavía.

Se espera que las autoridades policiales de Sutherland Springs ofrezcan una rueda de prensa para informar de lo que ha arrojado hasta ahora la investigación.

El alguacil Murphy señaló, según recogió CNN, que las fuerzas de seguridad y el autor de los disparos, en la persecución que siguió al tiroteo, entraron en el condado de Guadalupe que es vecino al de Wilson, al que pertenece Sutherland Springs.

Según Vicente González, Sutherland Springs es una pequeña localidad rural de mayoría de población anglosajona. Los latinos representan 20 % del total.

A su juicio, lo ocurrido hoy es otra «tragedia nacional». «Esto cruza las líneas raciales y de partidos, las zonas urbanas y las rurales», señaló para indicar que el Congreso debe estudiar por qué está ocurriendo esta «epidemia» y buscar soluciones a la violencia de las armas de fuego.

En Sutherland Springs hay una fuerte presencia policial, incluido el FBI, así como personal médico que ha transportado a varias personas a dos hospitales vecinos, uno de ellos militar.

Muchos de los heridos fueron trasladados al Centro Médico Militar Brooke así como al hospital Connally en Floresville, a 15 millas (24 km) de distancia de donde ocurrió el tiroteo.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, que se encuentra de gira en Japón, dijo hoy que estaba siguiendo desde allí la situación en el pueblo de Sutherland Springs (Texas).

«Que Dios esté con el pueblo de Sutherland Springs, Texas. El FBI y las agencias de la ley están sobre el terreno. Estoy siguiendo la situación desde Japón», escribió Trump en su cuenta oficial de Twitter desde Tokio, donde eran poco más de las 05.00 hora local.

«Nuestros pensamientos y oraciones están con todos los amigos y familiares afectados. Que Dios les proporcione consuelo en este momento de tragedia», indicó en un comunicado Sarah Huckabee Sanders, portavoz de la Casa Blanca, y quien agregó que Trump había hablado por teléfono con el gobernador de Texas, Greg Abbott. EFE

Más relacionadas