
El vigilante de las Américas
Editorial del diario Los Angeles Times
Los Angeles, Estados Unidos
No sorprende a nadie que el presidente ecuatoriano Rafael Correa esté molesto con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (un grupo de vigilancia que protege de los abusos a los líderes indígenas, periodistas y organizaciones de la sociedad civil en el Hemisferio Occidental). Al parecer el sentimiento es mutuo, ya que la CIDH ha denunciado, con razón, los esfuerzos de Correa por limitar la libertad de expresión y la crítica en su gobierno. La CIDH también ha opinado duramente sobre el intento de Venezuela de prohibir a un candidato de la oposición a postularse para la presidencia contra Hugo Chávez.