Quentin Tarantino se une a marcha contra brutalidad policial

El cinesta Quentin Tarantino, centro, participa en una marcha contra la brutalidad policial, el sábado 24 de octubre de 2015, en Nueva York. (AP Photo/Patrick Sison)

NUEVA YORK (AP) — El galardonado cineasta Quentin Tarantino se sumó a cientos de manifestantes que portaban carteles, lanzaban consignas con megáfonos y marchaban por las calles de la ciudad el sábado en protesta por la oleada de brutalidad policial que se ha registrado en todo el país.

«Soy un ser humano con conciencia», dijo Tarantino, que viajó desde California para participar en el acto. «Y si uno cree que se están registrando asesinatos entonces necesita alzarse contra eso. Me encuentro aquí para decir que estoy del lado de los asesinados».

El grupo se reunió el sábado en el parque Washington del vecindario Greenwich Village en Manhattan antes de marchar por aproximadamente 3.2 kilómetros (dos millas) a lo largo de Sixth Avenue. Los manifestantes pasaron entre una línea de agentes de la policía que había acordonado un carril del tráfico para el evento. Mientras avanzaban, quienes portaban los megáfonos hacían un recuento de los asesinatos mientras otros ondeaban carteles con fotografías de los muertos, en su mayoría hombres de raza negra, y las fechas y lugares de sus decesos.

El evento es el último de tres protestas que el grupo RiseUpOctober organizó en Nueva York esta semana. Los oradores en la manifestación dijeron que desean brindar justicia a la gente que ha muerto a manos de los policías.

Temako Williams caminó junto al activista Cornel West, uno de los organizadores. Su hijo, La-Reko Williams, fue muerto por la policía en 2011 en Charlotte, North Carolina. Un jurado federal determinó que un agente de la policía de Charlotte-Mecklenburg, que no enfrentó cargos por el incidente, ejerció fuerza de manera excesiva, y otorgó a Temako Williams una indemnización de 500.000 dólares.

Pero, dijo la mujer, el dinero no es un sustituto de la justicia.

«Ese no es el precio de la vida de mi hijo», señaló. «Es una herida que no sanará». (E)

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