El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo que su Gobierno trabaja para lograr en la conferencia sobre cambio climático que se celebrará en diciembre en París un «acuerdo vinculante» y «con capacidad sancionadora» contra países «que siguen destruyendo el planeta» al emitir gases de efecto invernadero.
Ecuador, que ocupa la presidencia de turno de la Comunidad de Estados latinoamericanos y Caribeños (Celac), ha convocado en Quito el 5 y 6 de noviembre una reunión de cancilleres y ministros de Ambiente para consensuar posiciones comunes de cara a la COP21, que tendrá lugar en París.
La propuesta de un pacto vinculante se promueve en el seno de la Celac, en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y en «diferentes bloques mundiales», explicó el mandatario durante un encuentro con periodistas de medios internacionales en Quito.
Correa dijo que en el Gobierno son «optimistas, pero realistas» de cara a la consecución de ese acuerdo, que va a ser «muy difícil» lograr, pues otras medidas acordadas en cumbres anteriores sobre cambio climático, como las de Río de Janeiro y Kioto, al no ser vinculantes «no han tenido eficacia».
«Mientras los países más poderosos no tengan esa voluntad de asumir su responsabilidad» por lo que «están haciendo al planeta, va a ser muy difícil», agregó, al diferenciar a los países contaminantes de los generadores de bienes ambientales, como los de la cuenca amazónica.
Correa defendió otras propuestas que, según dijo, serán presentadas en París, como las compensaciones a países que generen bienes ambientales, el impuesto mundial al consumo de hidrocarburos y el libre acceso a tecnologías para evitar contaminación o paliar los efectos del cambio climático. EFE (I)