El abogado Eduardo Carmigniani, que se defiende de la acusación de concusión en el caso Synohidro, ha recordado a la ahora exvocera de la Presidencia de la República, Carolina Jaramillo, a quien el 6 de noviembre pasado advirtió que «tendrá que responder judicialmente» por «pretender interferir indebidamente» ante el juez que sigue la causa, que «el poder es efímero».
«Tanto el de quienes pretenden amedrentar en público a los jueces, como el de los que lo hacen, cual fantasmas, tras bastidores», ha agregado en una comunicado público que se ha difundido en el página 3 del diario Expreso, el día de hoy.
«Fantasma» es el sobrenombre que se atribuye a Fausto Jarrín, asesor del ministerio de Gobierno, y que anteriormente ejerció como abogado del expresidente Rafael Correa y diputado de la Revolución Ciudadana.
Synohidro, nombre de la compañía china que construyó la represa Coca Codo Sinclair, también es el nombre con el que la Fiscal General Diana Salazar designó la investigación de sobornos supuestamente entregados al entonces vicepresidente Lenín Moreno, durante la presidencia de Rafael Correa.
Carmigniani alega que puesto que nunca ha sido un servidor público es imposible que hubiera sido sobornado. Y que «dos contundentes informes de peritos nombrados por la Fiscalía» confirman que nunca sobornó a nadie. Y que tampoco ayudó a que alguien lo haga.
Eduardo Carmigniani es columnista de este sitio desde su fundación, en junio de 2011.
