Santiago de Chile, 21 jun (EFE).- El juez chileno Mario Carroza, encargado de indagar la muerte del poeta Pablo Neruda, afirmó hoy que analizará los antecedentes médicos del cáncer de próstata que padecía el literato, antes de establecer los siguientes pasos de la investigación, entre los que no se descarta exhumar sus restos.
«A parte de la investigación que está encargada a la Brigada de Derechos Humanos, nos parece necesario, y así se ha conversado con el Servicio Médico Legal, establecer los antecedentes médicos que existían sobre el cáncer que tenía», dijo Carroza a los periodistas.
«Con todos los antecedentes en la mano es posible tomar una decisión que nos parezca atendible», dijo el juez, quien a principios de este mes se hizo cargo de la querella presentada por el Partido Comunista (PC) de Chile.
Con esta medida, los comunistas chilenos solicitaron que se investigue si el premio Nobel de Literatura, fallecido el 23 de septiembre de 1973, fue asesinado o murió debido al cáncer que padecía.
El relato oficial de los hechos, aceptado por la familia de Neruda, indica que el poeta falleció en la clínica santiaguina Santa María debido a un avanzado cáncer de próstata, doce días después del golpe de Estado que derrocó a su amigo el presidente Salvador Allende.
Sin embargo, Manuel Araya, chófer y asistente personal de Neruda, declaró varias semanas atrás en una entrevista a la revista mexicana Proceso, que el poeta murió asesinado con una inyección que le aplicó un médico y no debido a un empeoramiento del cáncer que padecía. EFE