Miles de casas sin luz y caos en transporte por temporal en Reino Unido

Miles de hogares permanecen este jueves sin luz por el temporal de lluvia y viento que azota al Reino Unido, donde las inundaciones han provocado un caos en los medios de transporte y el cierre de carreteras y puentes.

El Servicio Meteorológico pronosticó para mañana nuevas precipitaciones por otra corriente procedente del Atlántico, que empeorará la ya caótica situación en que se encuentran muchas localidades inglesas, sumidas bajo las aguas desde hace varios días.

Según el Servicio Meteorológico, las aguas del río Támesis pueden subir en los próximos días al nivel más alto en sesenta años.

Además de las 16 alertas «graves» de inundaciones -peligro para la vida- que la Agencia de Medio Ambiente mantiene en el sur y suroeste de Inglaterra, hay otras 400 de menor gravedad.

Ante el panorama desolador que presentan algunos condados, el primer ministro británico, David Cameron, afirmó hoy a la BBC que esta situación no debe repetirse, por lo que prometió estudiar la manera de financiar mejor las defensas contra inundaciones.

«No podemos permitir que esta situación vuelva a pasar. Por supuesto que uno tiene este tiempo que no es normal, pero como país tenemos que hacer más a fin de ser más resistentes», agregó Cameronlítico, que hoy tiene previsto visitar otra vez áreas inundadas.

El «premier» también informó de que el Gobierno pedirá asistencia financiera a la Unión Europea (UE) para ayudar a los ganaderos y agricultores cuyas tierras han quedado bajo las aguas.

La Asociación de Redes de Energía, que representa a las compañías energéticas en el Reino Unido, informó hoy de que 80.000 hogares están todavía sin luz, en su mayoría en Gales, pero se ha podido restablecer la electricidad en unas 70.000 viviendas.

En Gales, el ministro principal, Carwyn Jones, admitió que el restablecimiento del suministro eléctrico es un «gran desafío» para los técnicos debido a la intensidad de los vientos.

Las inundaciones, que han obligado a muchas familias a abandonar sus casas, han provocado problemas en los servicios ferroviarios, con numerosas cancelaciones y retrasos en las áreas más castigadas por los precipitaciones, como las cercanas al río Támesis, a las afueras de Londres, y en el suroeste de Inglaterra.

En algunas localidades, como la de Datchet, cerca de Londres, las vías ferroviarias están tan inundadas que los trenes han sido cancelados y los recorridos son cubiertos por autobuses.

El ministro de Transporte, Patrick McLoughlin, prometió hoy en el Parlamento que su departamento facilitará 61 millones de libras (73 millones de euros) para reparar las líneas ferroviarias.

«Es importante asegurar que la red (de transporte) es resistente en el futuro ante las amenazas (temporales) de este tipo», agregó.

Además de los problemas de los británicos para llegar a sus puestos de trabajo o llevar a los niños al colegio, la tormenta obligó anoche a cancelar dos partidos de la liga inglesa, el Manchester City-Sunderland y el Everton-Crystal Palace, por las dificultades de los aficionados para llegar a los estadios.

Muchas carreteras permanecen cerradas por inundaciones o por la caída de árboles pues los vientos llegaron anoche en varias zonas de Inglaterra a 160 kilómetros por hora.

Además del Támesis, también ha crecido el río Severn, que está en el noroeste de Inglaterra y es el más largo del país, lo que ha obligado a cerrar el puente colgante Severn, que une la localidad galesa de Monmouthshire y el condado inglés de Gloucestershire.

En Wiltshire (suroeste de Inglaterra) un hombre de unos 70 años murió ayer electrocutado cuando trataba de retirar un árbol caído sobre unos cables de electricidad, según la policía.

Más de cien militares están ayudando a colocar sacos de arenas en varias zonas afectadas, mientras que otros 2.000 están en reserva para ser desplegados en cualquier momento. EFE

Más relacionadas