Moscú (AP) — Rusia rechazó airadamente el miércoles la advertencia de la Unión Europea de que no reconocerá las elecciones locales organizadas por insurgentes pro rusos en el este de Ucrania e indicó que el rechazo a los comicios podría descarrilar una frágil tregua.
Moscú ha prometido reconocer la votación programada para este domingo, pero el presidente ucraniano Petro Poroshenko ha advertido que los comicios infringirían un acuerdo de cese al fuego suscrito en Minsk el mes pasado.
La Unión Europea advirtió el miércoles que no reconocería los comicios, que «van contra la letra y el espíritu del Protocolo de Minsk, y afectarían el avance para encontrar una solución política sostenible en este marco».
Por su parte, el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, dijo que los comicios serían una infracción a la Constitución y las leyes nacionales.
«Estas ‘elecciones’ socavarán seriamente el Protocolo y Memorando de Minsk, que deben ser implementados en su totalidad a la mayor brevedad», dijo en un comunicado.
La cancillería rusa respondió diciendo que el acuerdo original en Minsk contemplaba elecciones locales en los territorios controlados por los rebeldes entre el 19 de octubre y el 3 de noviembre, y que Poroshenko programó posteriormente elecciones en las zonas controladas por los rebeldes para el 7 de diciembre sin siquiera consultar con ellos.
Previamente este mes, Poroshenko firmó una ley que ofrece amplia autonomía a las regiones controladas por los rebeldes. Pero el Parlamento ucraniano todavía no ha fijado los detalles necesarios para implementar la ley y celebrar los comicios. Los rebeldes han desestimado la ley, calificándola de propaganda.
Aunque el cese al fuego ha ayudado a reducir las hostilidades en el oriente de Ucrania, los combates han continuado alrededor de Donetsk, la principal ciudad en poder de los rebeldes, así como otras áreas, porque las partes no han llegado a un acuerdo sobre una línea de demarcación que los separaría.
La cancillería rusa advirtió el miércoles que un rechazo a los comicios del domingo «pudiera amenazar todo el proceso de una solución pacífica». También prometió que Moscú exhortaría al nuevo liderazgo rebelde a cumplir la promesa anterior de ayudar a preservar «el espacio común económico, cultural y político de Ucrania».