El volante de la Juventus, Andrea Pirlo, no pudo contener las lágrimas tras haber perdido la final de la Liga de Campeones contra el Barcelona, en el estadio Olímpico de Berlín
La Juventus pudo haber conquistado el título e incluso igualó las acciones al minuto 55 con un tanto de Morata; sin embargo, el Barcelona superó con velocidad la zaga defensiva del cuadro italiano y liquidó el partido con goles de Rakitic, Luis Suarez y Neymar.
Pirlo representa el fútbol en mayúsculas, el fútbol de hilo y aguja que rara vez deja de ser una maquinaria perfectamente engrasada para doblegar a sus rivales. Con el número 21, es la figura principal del Juventus, el pilar que marca el ritmo a los suyos desde el centro del campo. A sus espaldas acumula 110 partidos en la Champions.
Pirlo puede presumir de haber conquistado dos Ligas de Campeones con el AC Milan (2003 y 2007). Precisamente su primer triunfo europeo en 2003 fue contra el Juventus, cuyo portero era entonces su ahora compañero Buffon.
Debutó con el Inter de Milán, en 1998, y después fichó por el Milan, donde estuvo diez años, hasta que en 2011 entró a formar de la Juve.
Desde entonces, ha permanecido en este cuadro intratable en los últimos años en la Liga nacional, pues ha vencido cuatro veces consecutivas el campeonato con una distancia muy notable respecto a sus inmediatos competidores.
Ahora, la continuidad de Pirlo, de 36 años, está en el aire. La «Vecchia Signora» acumula seis derrotas en ocho finales de la Copa de Europa. Sigue anclada en los dos títulos, el último de ellos logrado en 1996.
«La historia demuestra que nos cuesta mucho ganar este título», admitió el mediocampista Claudio Marchisio. «No hemos sido capaces de coronar el año con la victoria, pero ha sido una gran temporada».
