Los Ángeles (EEUU), (EFE).- El camino que lleva de Chile a Hollywood es largo y tortuoso, más de lo que les gustaría a los impulsores de «Chilewood», concepto que consiste en hacer películas en ese país sudamericano para distribuir en EEUU, cuyas obras sufren para competir en una cartelera dominada por los estudios.
El debut estadounidense de «The Stranger» el viernes es un éxito para el equipo liderado por Nicolás López, Miguel Asensio y el cineasta del género de terror Eli Roth, cuya alianza trasnacional comenzó con «Aftershock» (2012) y ha generado también «The Green Inferno»(2013), «The Stranger» (2014) y «Knock Knock» (2015).
«Hay bastante sangre, sudor y lágrimas en cada película», aseguró a Efe el guionista uruguayo Guillermo Amoedo para quien «The Stranger», una historia que aborda el vampirismo como si fuera una peligrosa enfermedad, es su ópera prima como director.
Amoedo ha firmado el guión de todos esos largometrajes de los cuales a día de hoy solamente se ha estrenado en EEUU «Aftershock».
«The Stranger» será el segundo en llegar y el 25 de septiembre le tocará el turno a «The Green Inferno», cuya fecha de lanzamiento se anunció la semana pasada.
El propio Roth no ocultó la alegría que sintió cuando el 1 de junio reveló que «The Green Inferno» iba a tener finalmente distribución en EEUU, y llegó a decir que el filme había sido «salvado» por Blumhouse Productions, los mismos que están detrás de la saga «Paranormal Activity».
«Es como un milagro», comentó la actriz chilena Lorenza Izzo, musa de «Chilewood» (participó en las cuatro películas) y esposa de Eli Roth.
«El ‘green inferno’ ha sido el infierno del estreno», declaró ella, que ya se mentaliza con entusiasmo para los meses que tiene por delante de promoción del filme y que servirá para dar aliento al proyecto de «Chilewood».
Este modelo de negocio consiste en producir en Chile películas en inglés y de calidad a muy bajo coste según los estándares de Hollywood -menos de 10 millones de dólares (unos 8,8 millones de euros)- para su comercialización principalmente en EEUU -el mayor mercado cinematográfico del mundo-, donde el potencial de rentabilidad es elevado.
El principal obstáculo con el que se está encontrando esta apuesta que involucra, tanto a talentos latinoamericanos como estadounidenses, es el gasto asociado con la distribución, muy necesario para lograr que los filmes disputen la atención del espectador a las todopoderosas compañías de Hollywood.
«Estrenar una película ahora en Estados Unidos es muy caro», indicó Roth, que señaló que cintas como «The Stranger» se miden algunas veces con producciones de estudio «que tienen entre 50 y 60 millones de dólares» (de 44 a 53 millones de euros) solo en promoción.
«Las películas independientes están siendo aplastadas por las más grandes. Es cada vez más difícil conseguir que alguien ponga 30 millones (26,5) en promocionar un filme que cuesta entre 1 y 3 millones (de 880.000 a 2,6 millones de euros), porque incluso aunque tenga un buen resultado en la primera semana, otras la van a sacar de cartelera (sin tiempo para recuperar la inversión)», comentó Roth.
«The Stranger» se presenta de forma limitada en Los Ángeles y Nueva York este viernes con la esperanza de poder expandirse a un total de 10 ciudades, aunque su debut cinematográfico coincide con su disponibilidad en los servicios de vídeo doméstico bajo demanda.
«The Green Inferno» es una apuesta más ambiciosa y saldrá en cerca de un millar de salas en EEUU, y aún está pendiente de cerrarse el posible estreno de «Knock Knock», en la que Izzo y la cubana Ana de Armas seducen y atormentan a Keanu Reeves.
Ese filme sí verá la luz este mes en Reino Unido, y en septiembre en Chile.
Los próximos meses, pues, serán cruciales para «Chilewood», que opera sin «un acuerdo oficial» ni un compromiso para hacer un número de películas al año.
«No somos una factoría, somos creativos y cuando sentimos que tenemos una idea, la llevamos a cabo», manifestó Roth, que constató la voluntad del equipo de «seguir trabajando», aunque en estos momentos no se ha concretado cuál será el siguiente proyecto. EFE
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