El alcalde de Guayaquil Jaime Nebot, que participa en Nueva York en la Cumbre Mundial de las Ciudades, dijo este miércoles en una entrevista radial vía telefónica, que va a interrumpir su viaje y saldrá para Ecuador el día de mañana porque no es un buen momento para estar fuera.
Sobre la Ley Orgánica para la Redistribución de la Riqueza dijo que «todo ser humano trabaja y se esfuerza para adquirir cosas y dejarle a sus hijos, todo hombre, toda mujer, trabaja y se esfuerza para eso, no es al revés, pero ahora resulta lo contrario, ahora resulta que el esfuerzo de adquirir bienes, que lo que uno tiene, lo que uno gana tiene un heredero nuevo, tiene un destinatario nuevo».
«Este no es un Estado que da, es un Estado que quita y yo estoy en contra de eso y hago una pregunta: ¿quién va a invertir?, ¿quién va a adquirir un inmueble?, para qué lo va a adquirir si el inmueble se valora y gran parte se lo lleva el Estado, y si se muere gran parte de ese bien también se lo lleva el Estado, ¿quién va a generar crecimiento económico?, ¿quién va a generar empleo? Yo me pregunto: ¿es malo ser empresario?, ¿la gente quiere ser pobre? Es cuestión no solo de conceptos, es cuestión de sentido común», agregó.
El alcalde dijo que «hoy el ejemplo de esta ciudad (Guayaquil), el espíritu de superación, ha demostrado que la gente quiere prosperar y lo primero que hay que hacer es no politizar esto, hay que explicarle a los ciudadanos este tema, explicar que es lo que le están haciendo, que es lo que les va a pasar, cuanta falacia hay en todo esto».
«Es fácil decir verdades a medias que son grandes mentiras», expresó.
Para Nebot, «primero hay que concientizar, lo segundo que esto le sirva al gobierno para rectificar, si no sabe lo que va a causar que es una cadena de miseria y si nada le funciona habrá que luchar como sabemos los guayaquileños en busca de libertad».
«En lo personal, cuando yo crea que haya llegado ese momento yo estaré en las calles luchando y convocando a la gente para hacerlo», aseguró.
Nebot añadió que «esto explica una destrucción patrimonial, una caída del empleo. Hay que luchar por lo nuestro y lo de todos, por el progreso del país, no hay otra alternativa. Se dice que puede haber riesgos pero el mayor de los riesgos es no correr ninguno». (I)