Santa Elena.- Durante su enlace sabatino, el presidente Rafael Correa ha pedido a las bases de su movimiento Alianza País permanecer atentos frente a los intentos de «conspiración» que él considera se están dando contra su régimen para propinarle un «golpe blando».
Correa piensa que el, hoy retirado, proyecto de Ley de Redistribución de la Riqueza puso «el dedo en la llaga a los ricos», pues solo afectaría al 2% de ecuatorianos. Un porcentaje al cual, piensa el presidente, pertenece el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot.
Considera que la ciudadanía ha sido engañada respecto del impuesto a la herencia que, a su criterio, es una medida justa y necesaria para combatir la desigualdad social del país.
En ese contexto, Correa pidió a sus seguidores «estar listos» para defender a la revolución ciudadana en las calles, frente a una «conspiración» que la oposición emprende, según piensa, para defenestrarlo. «Somos la inmensa mayoría pacífica, pero vamos a defender nuestra revolución y al momento en que quieran tocar al presidente o al gobierno nacional. ¡Todos a la calle!», dijo el presidente.
«Hay que estar listos, estar listos incluso a salir a las calles», señalo Rafael Correa. Él piensa que la oposición intentará una «movilización permanente» para desestabilizarlo, pese al retiro de la Asamblea Nacional de los proyectos de ley que han generado molestia, para generar un clima pacífico ante la visita del Papa Francisco.
«Ya no jueguen con la paciencia del pueblo unos cuantos oligarcas que quieren volver al pasado, porque si no encontrarán a ese pueblo más unido que nunca», dijo Correa y advirtió que no permitirá ese retroceso al pasado.
Hace poco el presidente hizo un llamado al diálogo, en su intento por detener los más de diez días de protestas que se han llevado a cabo en las principales ciudades del país. (I)