Quito.- Como «lapsus calamis» describió la jueza Gabriela Estefanía Lemos Trujillo al error por el cual se convocó al periodista Roberto Aguilar a rendir confesión judicial el sábado pasado, contra prohibición expresa de Ley.
El periodista Roberto Aguilar y sus abogados enviaron un escritomanifestándole a la jueza que no puede convocar una diligencia judicial en día de descanso obligatorio, al tenor de los artículo 312 y 313 del Código de Procedimiento Civil y del 100 numeral 3 del Código Orgánico de la Función Judicial.
En ese escrito Aguilar expresaba a la Función Judicial que no estaba claro si Fernando Alvarado comparecía como Secretario de Comunicación o como individuo; tampoco -a criterio del periodista- se ha establecido la relación que la confesión solicitada pueda tener con las acciones posteriores que pretenda tomar el solicitante, como manda la Ley.
Mediante la providencia en que la jueza fijó nuevo día y hora para la diligencia, también recordó a Aguilar y a sus abogados la siguiente advertencia: «se le previene que de continuar con asertos de esa naturaleza, esta autoridad actuará conforme lo mandan los artículos 130 y 131 del Código Orgánico de la Función Judicial».
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