La situación del fundador de WikiLeaks, el australiano Julian Assange, así como las posibilidades de financiación externa para el presupuesto estatal, fueron algunos de los temas que el nuevo presidente de Ecuador, Lenín Moreno, trató hoy en un encuentro con la prensa extranjera acreditada en su país.
Moreno se reunió con corresponsales extranjeros en la localidad andina de Cochasquí. En ese sitio fue donde recibió el simbólico «Bastón de mando», ante la presencia del presidente boliviano, Evo Morales.
Moreno dijo que de manera respetuosa, propondrá al Reino Unido que permita que Assange salga de Londres y viaje a Ecuador, en goce del derecho a asilo que le concedió el Gobierno de Quito en 2012.
Assange lleva más de cuatro años refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, con el objetivo de evitar su extradición a Suecia y un eventual traslado a Estados Unidos, donde se enfrentaría a un tribunal por las miles de filtraciones de su plataforma WikiLeaks.
Según Moreno, Ecuador propondrá al Reino Unido que «permita traer al señor Assange al país«, toda vez que el pasado 19 de mayo la fiscalía sueca decidiera cerrar un caso de supuesta violación que mantenía hace siete años contra el australiano.
Pese a que Ecuador, basado en esa decisión fiscal, ha pedido a Londres que extienda un salvoconducto para que Assange abandone el Reino Unido, la Policía británica dijo que está obligada a cumplir con la orden de arresto emitida por la Corte de Magistrados, en virtud de la solicitud de extradición de Suecia, que todavía está vigente.
De otra parte, Moreno indicó que hay acercamientos entre su país y el Banco Mundial para encontrar líneas de financiación.
El anuncio llamó la atención, ya que el anterior gobierno de Rafael Correa, correligionario de Moreno, evitó acudir a los organismos multilaterales en busca de financiación.
Correa, antecesor de Moreno, optó por contraer deuda con otras fuentes, especialmente China, su mayor socio financiero.
Moreno indicó que el presupuesto del Estado estima cantidades de entre 5.000 y 8.000 millones de dólares en inversiones, especialmente para proyectos sociales como la «Minga Agropecuaria» y el plan «Toda una Vida«.
«Qué mejor inversión que la población», enfatizó Moreno.
El nuevo mandatario ecuatoriano también se refirió a otros temas como la controvertida «Ley de comunicación», que crispa a la oposición y a varios medios de prensa, y no descartó impulsar reformas a esa normativa.
También respondió a preguntas sobre el caso de sobornos en la región vinculado a la constructora brasileña Odebrecht y dijo que espera que se entreguen «todos» los nombres de los involucrados en este escándalo que también ha salpicado a su país.
Moreno, además, dijo que pese a no compartir la ideología de mandatarios como el estadounidense Donald Trump, «respeta la autodeterminación de los pueblos».
El mandatario dijo esperar que haya un reforzamiento de la amistad con Estados Unidos, el principal socio comercial de Ecuador. EFE
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