Una de las características de cantante español Camilo Sesto, que ha muerto la madrugada del domingo 8 de septiembre, a los 72 años) era la entrega emocional de sus conciertos en directo. Su afición ha recordado en estos días posteriores a su muerte el de enero de 1982, cuando rompió a llorar en pleno concierto cuando dedicaba una canción a su madre.
El cantante tenía 35 años. Actuaba en Palma de Mallorca ante 16.000 personas. Su padre había muerto cinco meses antes. Iba a cantar uno de sus clásicos, Perdóname. Y entonces pregunta: «Está por aquí doña Joaquina, mi madre. ¿Dónde estás?». Y le lanza un beso.
«Te voy a dedicar una de mis mejores canciones para ti solita, Perdóname». La cámara enfoca a la madre, visiblemente emocionada, que le devuelve el beso ante los aplausos del público. Camilo Sesto entona la pieza: «Perdóname, si pido más de lo que puedo dar / Si grito cuando yo debo callar / Si huyo cuando tú me necesitas más./ Perdóname…». Y aquí se da la vuelta el cantante, incapaz de cantar.
Y empieza a llorar. Intenta seguir cantando pero le es imposible. La gente aplaude. El cantante sigue en el escenario y se seca las lágrimas. El público llora también entre aplausos. La cámara enfoca a Rocío Dúrcal, que parece conmovida. Camilo Sesto intenta retomar la canción, pero no puede, y entonces abandona el escenario.
Luego regresa para despedirse del público, aunque sigue llorando. El animador Joaquín Prat lo consuela: «Señoras y señores, así es un hombre cuando da todo y recibe todo de ustedes: Camilo Sesto».