El gigantismo populista

Maríasol Pons

Guayaquil, Ecuador

El populismo acecha con furor la península Ibérica. Pedro Sánchez logró hacerse del poder, tras múltiples convocatorias a elecciones y perder votos para el partido Socialista – al punto de necesitar el pacto con Podemos al que se había negado previamente, visto el fortalecimiento que arrojaron las urnas, tanto para el Partido Popular como para el movimiento de ultra derecha Vox.

Recordemos que el plan de austeridad manejado por Rajoy a partir del 2011 junto con su equipo de gobierno, cuando sonaba la amenaza de rescate por parte de la Unión Europea a la economía española, tomando en cuenta la debacle financiera griega, permitió evitar el rescate y la progresiva recuperación económica. No que ya no hayan problemas, pero esa austeridad fue una marca de la gestión del gobierno de Rajoy de apretarse el cinturón y tomar medidas duras, pero adecuadas, que funcionan a mediano y largo plazo. El gobierno de Sánchez -y sus múltiples convocatorias a elecciones- han podido darse sin zozobra económica producto de la austeridad impuesta por Rajoy y el gobierno del Partido Popular.

Luego de observar el manejo político dado desde junio del 2018 no es de sorprender la noticia que publica el diario ABC de España con respecto del “gigantismo” del gobierno de Sánchez. Ya no hay una vicepresidencia, ahora hay cuatro; y cito el artículo para ser exacta: “En total, el número de altos cargos ha pasado de 201 a 282. Son 81 altos cargos más con el Gobierno de Sánchez e Iglesias respecto a la última etapa de Rajoy: un incremento del 40,3 por ciento. Pero a esa expansión de altos cargos en todos los ámbitos hay que añadir la proliferación de asesores que los acompañan. La evolución del personal eventual en la administración es muy significativa, y es un reflejo del gigantismo del Gobierno de Sánchez.”

En Ecuador vivimos el drama de tener que costear un gobierno gigante. El correísmo infló el tamaño del estado de 27% con respecto del PIB en 2007 a 44% en 2014 y aunque hoy se intente reducirlo, los proyectos de austeridad quedan cortos, no así la incógnita de cuándo tendremos un estado eficiente.

En Chile está Juan Carlos Monedero- ex Podemos, “alejado” de Pablo Iglesias-, en un foro de izquierdas que aúpa la ola de terrorismo que ese país continua experimentando. En ese foro participaron también correístas ecuatorianos El juego geopolítico anti-desarrollo y populista en franca evidencia.

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