Panem et circenses

Alberto Molina

Alberto Molina Flores

Guayaquil, Ecuador

En el imperio Romano, se organizaban grandes espectáculos para el entretenimiento del pueblo, en el circo y en las plazas del imperio se realizaban luchas entre gladiadores, peleas de animales salvajes como tigres, leones; carreras de carros tirados por caballos, llamadas carreras de cuádrigas,  presentaciones teatrales; además, se repartía gratuitamente bebidas y alimentos. Está política de los gobernantes romanos era una forma de control social sobre el pueblo para desviar los verdaderos problemas que lo acosaban, especialmente a la gente pobre. Este es otro legado del Imperio Romano que los gobernantes populistas lo utilizan eficazmente, “pan y circo” para el pueblo.

En noviembre del 2014, pleno gobierno de Rafael Correa, el Gobernador del Guayas, Rolando Panchana, contrató, bajo la modalidad de régimen especial (sin un concurso público) a la empresa HDC Producciones C. A., para que realizara la fase II de la campaña Revolución Preventiva, para combatir el consumo de drogas en los colegios de la provincia del Guayas. El valor del contrato fue de 1´792.000  dólares. Incluía la presentación de 60 conferencias dictadas por el pianista argentino Raúl Di Blasio, para mil jóvenes en cada evento. Además, se debían realizar 10 funciones de películas para mil estudiantes y la cobertura de todos los requerimientos logísticos y técnicos que exigía el artista, incluyendo pasajes y estadía.

La Contraloría comprobó que Panchana, adjudicó el contrato “sin contar con los estudios previos al inicio del procedimiento precontractual, que justifiquen la existencia de la circunstancia material y/o necesidad concreta, que le faculte acogerse al régimen especial comunicacional”. Tampoco se coordinó previamente la realización de la campaña con el Consep, ente encargado de dirigir las políticas antidrogas y que HDC Producciones había aumentado su capital de 800 a 100.000 dólares cinco días antes de suscribirse el contrato. Se vivía a plenitud la época de las manos limpias y de los corazones ardientes, del despilfarro y el saqueo descarado, las autoridades en los diversos niveles  hacían prácticamente lo que les daba la gana…sobraba la plata, eran los tiempos de “viva la farra”.

Ahora en el gobierno del Presidente Lenín Moreno, el presidente ha pedido austeridad en todos los ministerios. El Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), dirigido por Iván Granda, ha contratado, bajo el régimen especial (sin un concurso público), un circo sobre hielo, por el valor de 2 millones 400 mil dólares, como parte del programa “Ecuador Solidario y Ciudades de Alegría”, dentro del Plan Anual de Política Pública del Gobierno.

El contrato, adjudicado a través de una productora, incluye 450 funciones que deben realizarse a escala nacional en 180 días. Este contrato, es exactamente igual al de Panchana en los tiempos del dispendio irresponsable.

Justo ahora que vivimos una época de “vacas flacas”, que no hay dinero para nada, a duras penas y con retraso se paga a la burocracia, a maestros, a militares y policías. No hay insumos médicos y medicinas en los hospitales del Estado, se les ocurre contratar un circo en el viejo estilo del Imperio Romano y de los gobiernos populistas que quieren desviar los problemas, especialmente económicos y sociales: “Pan y Circo”, para el pueblo.

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