La OTAN aseguró este jueves que la entrada de Finlandia y Suecia en la organización transatlántica contribuirá «de forma significativa» a la seguridad de toda la Alianza y también afirmó que está actuando con prudencia para evitar una escalada con Rusia.
«Contribuirán de forma significativa no solo a la seguridad de la región báltica, sino a la (seguridad) general de nuestra Alianza», declaró el vicesecretario general de la OTAN, Mircea Geoana, durante un evento organizado por el medio Politico.
Finlandia y Suecia han solicitado la entrada en la OTAN tras la invasión rusa de Ucrania, pero el proceso de adhesión se ha complicado por las preocupaciones de Turquía, miembro de la Alianza que acusa a Helsinki y, sobre todo, a Estocolmo, de mantener una política de acogida de militantes kurdos.
Los treinta miembros actuales de la organización transatlántica deben respaldar por unanimidad la entrada de nuevos países, por lo que se necesita el visto bueno de Ankara.
«En una organización como la nuestra, las preocupaciones de todos los aliados deberían tenerse en cuenta. Hay un diálogo activo en marcha entre Turquía, Finlandia y Suecia. El secretario general, (Jens) Stoltenberg, ofreció sus buenos oficios y ahora estamos trabajando para tener, esperemos, bastante pronto, a las tres partes también viniendo a la sede de la OTAN» en Bruselas, indicó Geoana.
En cualquier caso, recalcó que Finlandia y Suecia son los socios «más estrechos» de la OTAN y destacó el nivel de sus democracias y ejércitos.
El político también consideró que la invasión rusa de Ucrania es «uno de los fracasos históricos más estratégicos e importantes para Rusia», en referencia a que Moscú pensara que los ucranianos «le darían la bienvenida como liberador».
«Mira la feroz resistencia», dijo, y también mencionó que Rusia esperaba que occidente estaría «desunido y débil».
De todas formas, expuso que para la OTAN «una relación constructiva con Rusia siempre será importante, siempre que Rusia se comporte como un país normal y acate las normas internacionales».
«No queremos una confrontación con Rusia. Somos muy prudentes aquí en la OTAN para que la guerra en Ucrania no escale a algo más grande entre Rusia y la OTAN, pero la pelota está en el tejado de Rusia. Si quiere volver y convertirse en un actor normal y constructivo, que acata las normas internacionales, estaremos abiertos para volver a comprometernos con ellos. Por el momento, demuestra lo contrario», aseveró.
Recordó que con el Acta Fundacional Rusia-OTAN de 1997, que establece el marco de relaciones entre las dos partes, Moscú se comprometió a «no amenazar o usar la fuerza contra país alguno en Europa, a no actuar contra la integridad territorial de países en Europa y a cambio de eso (…) no habría presencia permanente (de la OTAN)» en los nuevos países de la Alianza.
Sin embargo, tras la anexión rusa de Crimea en 2014, la OTAN desplegó grupos de combate en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia. La guerra en Ucrania ha llevado a la Alianza a poner en marcha grupos de combate también en Rumanía, Bulgaria, Eslovaquia y Hungría.
El vicesecretario general aliado afirmó que el Kremlin «básicamente se ha retirado» del Acta Fundacional Rusia-OTAN y que las acciones de Moscú «han vaciado» el documento.
«No vemos significado político o práctico en declarar muerto este documento por nuestra parte», declaró.
Insistió en que el presidente ruso, Vladímir Putin, ha conseguido lo contrario de lo que pretendía, con Ucrania acercándose a occidente, más presencia de la Alianza en el este y más países deseando entrar en la organización transatlántica.
Sobre las amenazas nucleares del Kremlin, consideró que son declaraciones «irresponsables» y condenó esa retórica, pero subrayó que la Alianza no ve «cambio alguno en términos prácticos» que indiquen que Moscú piensa usar armas nucleares.
En cuanto a la cumbre de la OTAN que se celebrará en Madrid, Geoana dijo que será «realmente transformadora».
Señaló que por primera vez intervendrán en una cumbre aliada los líderes de Australia, Nueva Zelanda, Corea del Sur y Japón. Añadió que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, «asistirá de una forma u otra» a la cita.
El secretario general del Servicio Europeo de Acción Exterior, Stefano Sannino, consideró que la OTAN y la Unión Europea no compiten porque «son completamente diferentes en naturaleza, en el modo de operar, en los objetivos». EFE