En medio de las preocupaciones de los argentinos por la evolución económica, las tensiones internas del oficialismo y cuando queda un año para las elecciones, el peronismo celebró este lunes en Argentina el Día de la Lealtad, la fecha más emblemática del histórico movimiento político, ahora en el Gobierno.
Los distintos sectores políticos y sindicales del peronismo conmemoraron la fecha con múltiples convocatorias, lo que evidencia la división que vive el Frente de Todos, liderado por el presidente, Alberto Fernández, la influyente vicepresidenta, Cristina Fernández, y el ministro de Economía, Sergio Massa.
Ninguno de ellos acudió a los principales actos populares: mientras el mandatario y el ministro participaron juntos de la inauguración de una autopista en la localidad bonaerense de Cañuelas, la también expresidenta, ausente de los actos públicos desde que el 1 de septiembre pasado salió ilesa de un atentado en su contra, no tuvo ninguna aparición pública.
«Hoy va a haber muchas celebraciones a lo largo y ancho de la patria: recordemos lo que Perón y Evita nos dejaron, recordemos su mandato», expresó el presidente, que aprovechó la ocasión para hacer una férrea defensa de su gestión, pese a que reconoció que «algunos lo están pasando mal» por la inflación, y para reiterar sus críticas a la oposición y la deuda que dejó el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
Y los dardos a la principal coalición opositora, que según las encuestas tiene opciones de triunfar en las presidenciales de 2023, fueron la tónica general en todos los actos del Día de la Lealtad.
«Para que todo este esfuerzo que estamos haciendo no caiga en saco roto, lo que es necesario es seguir en la senda en la que estamos, no claudicar. (…) Si una sociedad se desarrolla en favor de unos pocos, eso no es una sociedad que se desarrolla, eso es una estafa», clamó Fernández.
Si bien la economía argentina acumuló en el primer semestre del año un crecimiento del 6,5 %, el país arrastra fuertes desequilibrios como la inflación, que en septiembre llegó al 83 % interanual y que impacta en las ya altas cifras de indigencia y pobreza.
«Lo primero que hay que generar es confianza política, cosa que no tiene el Gobierno», sentenció este lunes Facundo Moyano, quien en agosto de 2021 renunció a su escaño de diputado y decidió romper con el oficialismo.
Fernández, que se mostró seguro de que el país crecerá este año «cerca de un 5 %» y en 2023 no avanzará «menos de un 2 %», reconoció que la inflación «consume y carcome» a los asalariados, pero aseguró que con su equipo trabaja para solucionarlo.
ACTOS DIVIDIDOS
El Día de la Lealtad evoca el 17 de octubre de 1945, cuando una multitud reclamó a la dictadura de entonces que pusiera en libertad a Juan Domingo Perón, quien venía cosechando una fuerte popularidad por sus medidas sociales como secretario de Trabajo y había sido detenido por sus opositores militares.
Meses después, Perón ganó las elecciones y junto a su segunda esposa, Evita, la «abanderada de los humildes», sentó los cimientos de un movimiento que, más de 70 años después, sigue vigente.
En las calles, el acto más multitudinario se celebró en la Plaza de Mayo de Buenos Aires, al que adhirieron algunas de las máximas autoridades del kirchnerismo.
«Muchas veces les veo esas caras apesadumbradas o que están cerca de la desazón. No podemos darnos el lujo de la tristeza y del ‘no se puede’. Tiene que haber esperanza y hay esperanza. Esta plaza demuestra que vamos a poder salir adelante», arengó el diputado Máximo Kirchner, hijo de la vicepresidenta.
El político, que a principios de año renunció como presidente del grupo parlamentario oficialista por sus desavenencias con la gestión económica del Gobierno, llamó a «ofrecer en 2023 a la sociedad argentina un proyecto de país que realmente la interprete, la contenga, la proteja y la promueva», tras lanzar fuertes críticas al Gobierno de Macri, hoy opositor, al que reprochó en especial lo endeudado que dejó al país.
Aunque el presidente no estuvo en el acto kirchnerista, en Cañuelas estuvo junto a él el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, uno de los más cercanos a la vicepresidenta: «Hoy, un 17 de octubre, qué mejor que estar inaugurando obras, reconociendo derechos», señaló.
Por su parte, la Confederación General del Trabajo, principal central sindical nacional, históricamente peronista, celebró otro acto en la capital: «Hoy no hay una unidad en cuanto a la acción», dijo a la prensa Carlos Acuña, uno de los tres secretarios generales de la organización, al ser consultado por el estado del peronismo. EFE
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