Agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) allanaron el Centro de Privación de Libertad N.º 3, en Quito para recolectar indicios dentro de un presunto fraude procesal en el caso de María Belén Bernal.
La Fiscalía investiga la versión de que altos mandos policiales presionaron a la cadete Joselyn Sánchez para que cambie su versión sobre el asesinato de la abogada María Belén Bernal, ocurrido en la Escuela Superior de Policía, el 11 de septiembre, a manos de su marido, el teniente Germán Cáceres.
Los agentes revisaron los libros de registro; también conversaron con personal del lugar para determinar si Joselyn Sánchez, la única detenida por el asesinato de Bernal, ha recibido la visita de altos funcionarios policiales o de representantes de estos.
La versión de que Sánchez ha sido presionada ha sido divulgada por la madre de la cadete y el abogado de la misma.
Un juez negó, la semana pasada, un pedido de habeas corpus que pretendía su defensa para que enfrentara a la justicia en libertad.
La única testigo
Joselyn Brigitte Sánchez P., de 24 años, cadete de la Escuela Superior de Policía de Quito, dijo en su testimonio a la Fiscalía que el 11 de septiembre entró a la Escuela Superior de Policía, al norte de Quito, y que “por no más de cinco minutos” ingresó a la habitación del teniente Germán Cáceres, esposo de Bernal.
Según Sánchez, ella se encontraba en la habitación de Cáceres la medianoche del 11 de septiembre, cuando este recibió una llamada y le pidió que salga de la habitación y duerma en la de al lado, de otro teniente, por lo que escuchó todo lo que ocurrió y se ha convertido en la única testigo de los hechos.
