Guayaquil, Ecuador
Nos conmueve y horroriza los miles de inocentes víctimas de los enfrentamientos de las Fuerzas de Defensa de Israel contra los terroristas de Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámico, apareció por primera vez durante la primera Intifada a finales de 1987), secundado por la otra organización terroristas, la llamada Yihah Islámica y apoyados sin límites por los ayatolas de Irán.
Hamás controla con mano de hierro a 2 millones 300 mil gazatíez desde que ganó las elecciones parlamentarias de 2006, desde esa fecha no se ha convocado a otras elecciones, su poder es absoluto, siendo parte del Estado Palestino (Cisjordania y Franja de Gaza), no hay ninguna subordinación al presidente del Estado Palestino Mahamut Abbás, prácticamente ejercen una ilegal autonomía.
En 2007 se enfrentaron a la organización Al-Fatah, en la llamada Guerra Palestina, Al-Fatah fue derrotada y expulsada de la Franja de Gaza. Vale la pena señalar que Hamás no reconoce al Estado de Israel y en sus estatutos fundacionales, señala que Israel debe desaparecer. Igual, Irán, Estado Islámico teocrático, desde que los ayatolas se tomaron el poder en 1979, se declararon enemigos de Israel y han expresado que «Israel debe ser arrojado al mar».
Si esa es la posición de la organización terroristas de Hamás y de Irán que le secunda en sus acciones terroristas y le apoya incondicionalmente con armas, pertrechos militares y económicamente a Hamás. Aquí cabe una pregunta: ¿De acuerdo a las posiciones irreconciliables de Hamás e Irán contra Israel, qué espacio hay para negociar la paz y una convivencia armónica y de mutuo respeto?
A esto se suma las permanentes agresiones que ha sido víctima Israel por parte de Hamás, lanzamiento de cohetes a territorio israelita, incontables atentados terroristas y asesinatos de civiles y militares, etc.
El sábado 7 de octubre, fuerzas bien entrenadas y equipadas de Hamás lanzan un feroz ataque por tierra, mar y aire a indefensas poblaciones de judíos, especialmente kibutz, cercanas al norte de la Franja de Gaza, asesinan cruelmente a mujeres, niños y ancianos; además, irrumpen en un festival electrónico que asistían cientos de jóvenes de distintos país y asesinan sin piedad a cerca de 300 y como si esto fuera poco, son capturados alrededor de 200 niños, mujeres, adultos mayores y soldados y son llevados como rehenes al interior de la Franja de Gaza.
Ese terrible día, se contabilizan alrededor de 1400 muertos de Israel.
Aquí cabe una reflexión: los mandos de la organización terrorista de Hamas al planificar y llevar a cabo esta sangrienta operación, ¿habrán calculado las consecuencias inmediatas que iban a tener?
Las máximas autoridades civiles y mandos militares de Israel están empeñados, en esta oportunidad, de una vez por todas, eliminar esta permanente amenaza a la supervivencia del Estado de Israel a través de tres etapas; la primera, la Fuerza Aérea ha bombardeado instalaciones militares, puestos de mando y refugios de Hamás; la segunda, han iniciado operaciones urbanas con ataques terrestres al interior de la Franja de Gaza.
Es de lamentar la muerte de miles de inocentes ciudadanos, hombres, mujeres, niños y ancianos palestinos de la Franja de Gaza, por la irresponsable acción del implacable terrorismo islámico que profesa esta organización diabólica conocida como HAMÁS.
