El presidente de la República, Daniel Noboa, ha decretado el estado de excepción, durante 60 días, en todo el territorio nacional después que los reclusos de cuatro cárceles en distintas ciudades del país se amotinaran la mañana de este lunes 8 de enero de 2024, tomaran como rehenes a decenas de guías penitenciarios y los obligaran a leer proclamas en contra del traslado de prisioneros a otras cárceles.
Noboa ha dispuesto la intervención de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas en el interior de todos los centros penitenciarios del país; así como la libertad de reunión en todo el país, de manera que la Policía y las Fuerzas Armadas quedan facultadas para impedir y desarticular reuniones en espacios públicos donde se identifiquen amenazas al orden público.
Se ha suspendido también la inviolabilidad del domicilio, por lo que la Policía y las Fuerzas Armadas podrán intervenir en cualquier lugar para requisas e inspecciones, tendientes al hallazgo de escondites, almacenamiento de armas y desarticular amenazas en curso o futuras.
Suspende también la inviolabilidad de la correspondencia al interior de las cárceles. Y la libertad de tránsito, todos los días, por lo que se dispone el toque de queda en todo el país, entre las 23h00 y las 05h00.
Con chompa negra de cuero
Declara zona de seguridad a todas las cárceles del país, y en un radio de un kilómetro alrededor de ellas, por lo que la Policía y las Fuerzas Armadas pueden requisar cualquier vehículo que se acerque y disponer los cierres viales que decidan.
“Nosotros no vamos a negociar con terroristas, ni descansaremos hasta devolverle la paz a todos los ecuatorianos”, ha dicho Noboa en un video que ha difundido por las cuentas de X e Instagran de la Presidencia de la República. “Se acabó el tiempo en el que los condenados por narcotráfico, sicariato y crimen organizado le dictaban al gobierno de turno qué hacer”, ha agregado.
La declaratoria de estado de emergencia se ha dictado un día después que se conociera de manera extraoficial la fuga del cabecilla de la banda de Los Choneros, José Macías Villamar, alias Fito, de la Penitenciaría del Litoral, donde se encontraba recluido, condenado por narcotráfico y asesinato.
El gobierno no ha reconocido todavía de manera expresa la fuga de alias Fito.
Los Choneros son la banda de narcotráfico más grande y poderosa del Ecuador, si bien, no la única.
Ante la situación de seguridad que vive el país, el presidente @DanielNoboaOk toma acciones concretas para respaldar a las Fuerzas Armadas durante el proceso de intervención y control de cárceles.#ElNuevoEcuador pic.twitter.com/SUCR5aEFZl
— Presidencia Ecuador 🇪🇨 (@Presidencia_Ec) January 8, 2024
