Conoce los tipos de apuestas y las estrategias para la ruleta

Tradicionalmente, se ha tendido a considerar la ruleta como un juego simple, cuyo único misterio estribaría en saber dónde caería la bolita. Sin embargo, como saben bien los buenos jugadores, resulta mucho más profundo. Y lo es incluso en sus formatos más tradicionales, sin necesidad de irse siquiera a nuevas propuestas como las ruletas quantum, que tienen una mecánica más dinámica y el aliciente de la multiplicación de premios en determinadas casillas.

La complejidad de la ruleta clásica en cualquiera de sus versiones viene dada por la gran variedad de apuestas distintas que se pueden realizar, así como por las diferentes estrategias que se pueden aplicar.

Empezamos por las primeras.

Modalidades de apuestas en las ruletas

La apuesta a un número, la que se conoce como ‘pleno‘, es la más simple que se puede efectuar en cualquier ruleta, ya sea americana, francesa o europea. El único intríngulis estaría en que la bolita cayese en la casilla elegida, algo que resulta bastante emocionante de por sí…

Pero más allá de esta modalidad de apuesta que conocen incluso quienes nunca han jugado, existen otras muchas más que le dan bastante mordiente al juego. Así, tendríamos la que se hace con dos números consecutivos, denominada ‘caballo’ por hacerse a caballo entre ellos. O bien, la llamada ‘transversal’, que en su caso involucra a tres números de una fila, para lo que se colocan en un extremo de la misma las fichas, ya sean reales o virtuales.

Todavía es posible abarcar más números con apuestas como la del ‘cuadrado‘, consistente en colocar las fichas en la intersección de cuatro números para cubrirlos todos. E incluso se puede apostar a seis números de dos filas adyacentes, en lo que se denomina como ‘seisena.’

Si hablamos de apuestas externas, tenemos tanto las que cubren un bloque completo de doce números consecutivos, como las apuestas a docenas por columnas, donde se apuesta a los números dispuestos en tres columnas verticales del tapete.

Además, se puede apostar a un color rojo o negro, en vez de a un número o varios, si al número caerá la bola será par o impar e incluso es posible apostar por el rango de números que será ganador (‘pasa o falta’) del 1 al 18, o bien del 19 al 36.

Estrategias para el juego de ruleta

La presunta simplicidad de la ruleta queda desmentida por las múltiples posibilidades existentes en tipos de apuestas. Y también, las diversas estrategias que se han ido desarrollando con los años suponen una buena prueba de su complejidad, en el sentido de profundidad no de dificultad.

La mayoría de las estrategias implican una determinada gestión del bankroll en su búsqueda de aumentar las probabilidades de ganar, si bien no hay que perder de vista nunca la naturaleza impredecible de cualquier juego de azar como este.

Entre las estrategias históricas más antiguas tendríamos la Martingala, consistente en doblar la puesta tras cada pérdida, para así poder recuperar toda la cantidad restada de una tacada con una sola victoria.

Pese a que este sistema pueda tener cierta lógica de acuerdo a las leyes de la probabilidad, lo cierto es que entraña unos riesgos considerables de agotar rápidamente un bankroll, por lo que se requeriría que el mismo fuese bastante sustancial. O bien, jugar en una mesa low stakes de apuestas bajas, para evitar grandes pérdidas si la aplicación de la estrategia no da los resultados deseados.

El método Paroli es parecido a la Martingala, pero en su caso se doblan las apuestas tras cada victoria, buscando sacarle el máximo partido a las rachas positivas, por lo que tendría un menor anclaje en las leyes de la probabilidad, aunque al aplicarse tras haber ganado una partida sería menos arriesgado que el anterior.

Luego tendríamos también estrategias más complejas como la Fibonacci, que sigue la conocida secuencia matemática homónima, se aplica en apuestas que bordean el 50/50 (rojo o negro, par o impar) y consiste en comenzar apostando por una unidad, para en caso de derrota aumentar gradualmente las cantidades (1, 1, 2, 3, 5… cada número es la suma de los dos previos). Mientras que al vencer se retroceden dos pasos en la secuencia, de manera que por ejemplo tras haber apostado cinco euros y ganar la siguiente apuesta sería de tan solo dos.

Es un método que se aplica sobre todo para recuperar pérdidas poco a poco, sin correr los riesgos de la Martingala, si bien obviamente no se trata de una estrategia infalible.

Otro sistema también conservador sería la estrategia D’Alembert, consistente en incrementar o disminuir la apuesta en una unidad, dependiendo de si se ha perdido o ganado en la partida precedente.

Más allá de las virtualidades que puedan tener, ninguna de estas estrategias implica poder hacer apuestas seguras, con la misma certidumbre que teníamos al pronosticar que The Bear iba a barrer en los Emmy, pero sí que son métodos que tienen su utilidad para tratar de manejarse en el caos inherente a un juego de azar como laruleta.

En cualquier caso, lo que revelan tanto las modalidades de apuestas disponibles como las distintas estrategias son las capas de profundidad que ofrece el juego, que de simple no tiene nada.

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