Bogotá y sus claves para atraer inversión extranjera

Plaza Bolívar, en Bogotá. Foto de Archivo, La República.

En los últimos 10 años Bogotá ha recibido unos 20.000 millones de dólares en inversión extranjera a través de más de 1.100 proyectos que han generado unos 119.000 empleos directos. 

Entre los actores que apoyan esa estrategia de ciudad figuran la agencia Invest in Bogota, con cerca de 350 proyectos de inversión en ese tiempo.

Este año, la agencia, que llevó a cabo hoy el «Cuarto Encuentro de Inversión Extranjera en Bogotá-Plataforma de servicios globales en Latinoamérica», tiene como meta atraer 43 iniciativas y aumentar los 2.000 millones de dólares que hasta la fecha ha conseguido que se implanten en la capital colombiana desde 2009, con aproximadamente 35.000 puestos de trabajo.

«Estas inversiones han llegado de 47 países, en sectores tan diversos como tecnología, servicios, infraestructura y producción de cine y televisión», indicó a Efe el director ejecutivo de Invest in Bogota, Juan Gabriel Pérez.

A continuación los tres puntos claves por los que Bogotá es una ciudad atractiva para la inversión extranjera.

TAMAÑO DE LA ECONOMÍA 

La economía bogotana tiene el tamaño de la de países como Ecuador y supera a la de Uruguay, Paraguay o Panamá.

Según Pérez, se trata de una economía «dinámica», que crece por encima del promedio nacional al superar el 3 %, con un producto interno bruto (PIB) per cápita cercano a los 10.000 dólares.

Bogotá cuenta con una población económicamente activa de más de 4,6 millones de personas, superior a la de Ciudad de México (4,5 millones), Santiago (3,3 millones), Buenos Aires (1,7 millones) y Quito (936.000). 

La economía de Bogotá-Región está asociada a actividades de servicios (60 % del PIB), comercio (20 %) e industria manufacturera (10 %). 

Por otra parte, en Bogotá y sus zonas aledañas se realiza el 57 % de las transacciones financieras del país, lo que la convierte en el principal centro financiero de Colombia y uno de los más importante de América Latina. 

Asimismo, posee una clase media fuerte, que representa el 52 % de la población. 

UBICACIÓN ESTRATÉGICA 

La capital colombiana se ubica en el centro del país y tiene a su servicio el Aeropuerto Internacional El Dorado, el tercero que más mueve pasajeros en América Latina y el número uno en carga.

Según el concesionario Opain, El Dorado cerró el primer semestre del año conectando a más de 16 millones de pasajeros con 44 vuelos internacionales directos y 26 países a través de 24 aerolíneas. 

Estas operan más de 1.100 frecuencias internacionales directas semanales que certifican a Colombia y, en especial a su capital, como uno de los destinos más atractivos para las empresas aéreas, que encuentran en el mercado del país andino muchas oportunidades para crecer. 

Con corte a junio, hay en total 1.134 frecuencias semanales de compañías como Turkish Airlines, Iberia, Lufthansa, United, Avianca, Aeroméxico, Spirit, JetBlue, Delta, KLM, Latam y Copa Airlines que conectan al país suramericano con el resto del mundo. 

Eso se traduce en un total de 182.432 sillas semanales desde y hacia destinos como Madrid, Londres, Estambul, Nueva York, Múnich, Santa Cruz de la Sierra, Amsterdam, La Habana, Santo Domingo, Cancún, Miami, Santiago, Ciudad de Panamá, Barcelona, Fráncfort, Buenos Aires y París, entre otros. 

RECURSO HUMANO 

El talento humano que reside en Bogotá es codiciado internacionalmente.

En la región metropolitana hay unas 120 instituciones de educación superior de las que se gradúan anualmente cerca de 188.000 estudiantes, de los cuales 44.000 son de posgrado. 

El 42,6 % de las personas que obtuvieron títulos universitarios en Bogotá lo hicieron en el área de economía, administración, contaduría y afines, según un estudio realizado por el Observatorio Laboral para la Educación (OLE) del Gobierno colombiano. 

Los sectores que emplean a estos graduados son principalmente los de actividades inmobiliarias y empresariales de alquiler; administración pública y defensa; comercio, intermediación financiera, educación, industrias manufactureras y servicios sociales y de salud. EFE 

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