Kremlin acusa a Ucrania de «provocación muy peligrosa» en el mar Negro

El Kremlin acusó hoy a Ucrania de protagonizar una «muy peligrosa provocación» en el mar Negro, donde los guardacostas rusos apresaron el domingo tres barcos de la Armada ucraniana e hirieron a varios de sus tripulantes después de que estos supuestamente violaran sus aguas territoriales.

«Este asunto será abordado en el Consejo de Seguridad a iniciativa de Rusia. Estamos hablando de una provocación muy peligrosa que exige una atención y una investigación especiales», dijo Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la prensa local.

Peskov adelantó que la Cancillería emitirá posteriormente un comunicado en el que explicará en detalle lo ocurrido el domingo en las costas de Crimea cuando la flotilla ucraniana se dirigía al estrecho de Kerch.

Mientras, el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, calificó en una rueda de prensa el incidente del domingo de «inequívoca provocación».

«Se infringieron aspectos clave del derecho internacional, no sólo del mar… incluido la carta de la ONU, la convención de derecho del mar de 1982… que exigen a todos los países respetar la soberanía de otros países», dijo.

Lavrov subrayó que «la violación tuvo lugar con métodos muy peligrosos: unas maniobras en un pequeño estrecho. Por supuesto, eso podría haber causado amenazas y riesgos para el tránsito normal de buques en esas aguas».

Además, criticó los planes de Ucrania de imponer el estado de excepción, algo que la Rada Suprema o Parlamento ucraniano podría hacer hoy mismo, y llamó a los socios occidentales de Kiev a «calmar» a las autoridades ucranianas.

Rusia admitió haber abierto fuego el domingo por la tarde contra los buques ucranianos en sus aguas territoriales cerca de Crimea con el fin de obligarles a detenerse, aunque Ucrania mantiene que el ataque tuvo lugar en aguas neutrales y cuando sus barcos ya navegaban de regreso al puerto de Odessa en el mar Negro.

Eso ocurrió después de que Moscú decidiera cerrar el estrecho de Kerch para impedir el acceso de los buques ucranianos en el mar de Azov.

El presidente Ucrania, Petró Poroshenko, exigió hoy a los dirigentes rusos la «inmediata» liberación de los tripulantes de los tres buques apresados: las lanchas artilladas «Berdiansk» y «Nikopol», y el remolcador «Yani Kapu».

Según la Presidencia ucraniana, Poroshenko abordó hoy este asunto por teléfono con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

La Armada ucraniana denunció que en el ataque perpetrado por los guardacostas rusos resultaron heridos seis militares -algunas fuentes hablan de la hospitalización de tres de ellos-, aunque se desconoce el número de tripulantes que iban en los tres buques apresados.

La Defensora del Pueblo ruso, Tatiana Moskalkova, informó de que las fuerzas de seguridad rusas están interrogando a los tripulantes ucranianos. EFE

Más relacionadas