
La petrolera estatal ecuatoriana Petroecuador anunció este martes la desvinculación laboral de 70 empleados que, según la compañía, recibían salarios sobrevalorados que, en algunos casos, duplicaban lo establecido a su escalafón, y con ello prevé ahorrar 1,71 millones de dólares anuales.
Los despidos corresponden a casos de «personal sobrevalorado, que presentan distorsiones salariales superiores al 100 % respecto al valor de sus puestos, establecidos en la tabla salarial vigente», según Petroecuador en un comunicado.
En el mismo documento, la empresa pública apuntó que trabajan en la erradicación de distorsiones de sueldos que permitieron durante años que ciertos funcionarios «perciban salarios dorados, excesivos y sobrevalorados».
En algunos casos, las remuneraciones mensuales «superan incluso a las de gerentes y subgerentes de la empresa, situación que contraviene los principios de proporcionalidad, equidad y uso responsable de los recursos públicos», anotó la compañía al aseverar que los 70 cargos de los ahora desvinculados serán eliminados.
Como ejemplo de lo sucedido, una fuente de la empresa indicó a EFE que un auxiliar de servicios administrativos ganaba 1.780,24 dólares, cuando por la tabla vigente de remuneración mensual unificada de la empresa es de 531 dólares, lo que supone una diferencia del 235 %.
Salarios «dorados»
Además, un asistente contable percibía 3.355,77 dólares, un 152 % más de lo que establece la tabla salarial para su cargo, y un auxiliar de ventas en sucursal ganaba 2.195,63, un 210 % más de lo reglamentario.
Petroecuador aclaró que la desvinculación de los 70 servidores no afectará las operaciones estratégicas de empresa, ya que las funciones que desempeñaban «serán cubiertas por personal con perfiles equivalentes, conforme a los lineamientos del Manual Orgánico Integral Vigente».
Esta semana, en la rendición de cuentas del ejercicio 2024, el gerente general de Petroecuador, Leornard Bruns, dijo que la estatal exportó el año pasado un total de 113,4 millones de barriles de petróleo, lo que representó un importe de 7.779 millones de dólares, con un precio promedio de 68,56 dólares por barril.
La meta de comercialización internacional era de 115 millones de barriles, distribuida entre crudo Oriente, de densidad media (23 grados API), y Napo, de densidad alta (17 grados API).
El Gobierno, liderado por el empresario Daniel Noboa, busca contratar una auditoría externa que revise las cuentas de Petroecuador -la empresa estatal más grande del país- conforme exige el Fondo Monetario Internacional (FMI) como parte del programa crediticio aprobado en 2024. EFE
