La coronel Lilian Gabriela Gómez de la Torre se ha convertido en la primera mujer en asumir el mando de la Agregaduría Policial de Ecuador en España, institución creada hace seis años para ayudar a la comunidad inmigrante y servir como enlace entre las policías española y ecuatoriana.
Recién instalada en Madrid, ciudad a la que llegó el pasado 19 de mayo, Gómez de la Torre asume la tarea que tiene por delante, en unas circunstancias que considera «difíciles para mis compatriotas».
«En el poco tiempo que llevo aquí me he dado cuenta de lo que afrontan los migrantes ecuatorianos, con tanto desempleo. La situación está grave para ellos, y para el resto de España», señaló la policía ecuatoriana en una entrevista con Efe.
Por eso -añadió- «son muchos los compatriotas que acuden a nosotros para informarse de como regresar a Ecuador, aunque en realidad donde deben acudir es al consulado. Hay mucha desinformación y nosotros intentamos orientarles».
Junto a dos compañeros, Gómez de la Torre se encarga además de dar a conocer a los ecuatorianos en España la nueva normativa sobre el récord policial o certificado de antecedentes penales, necesario para tramitar la residencia o la nacionalidad.
«Antes para realizar el trámite había que pagar cinco euros, pero desde el pasado miércoles no cuesta nada y se puede realizar por internet, al igual que el canje de las licencias profesionales. Hay muchos compatriotas que desconocen este nuevo decreto y les estamos asesorando», explicó.
En su oficina en Madrid, y vestida de civil, «porque el uniforme sólo lo usamos para actos oficiales», la coronel ecuatoriana, que sustituye en el cargo al también coronel Fausto Carrillo, recibe además denuncias por casos de maltrato o violencia intrafamiliar.
«Desconocen las leyes españolas y los derechos que les amparan. Nosotros les ponemos en contacto con la policía del sector o del barrio donde viven», dijo.
La relación con sus compañeros de las fuerzas de seguridad españolas, tanto Policía Nacional como Guardia Civil, es constante, y con ellos trabajan en temas relacionados con el narcotráfico, la trata de personas, el crimen organizado y las mafias.
«La mayoría de los cargamentos de droga vienen a los puertos de España y hacemos trabajos de enlace para determinar qué pasa con el narcotráfico y las bandas organizadas», indicó.
Además -prosiguió- «cuando hay ecuatorianos con antecedentes que han estado en España, la policía se pone en contacto con nosotros para que sean deportados y, en el caso de tener sentencia, cumplan su condena allá. Se hace por medio de la Interpol, la Policía Nacional de Ecuador y nosotros, que actuamos como intermediarios».
En colaboración con las fuerzas de seguridad españolas, la policía ecuatoriana prepara, además, la puesta en marcha de varios programas de capacitación, cuya organización pasa también por la Agregaduría Policial del país andino en España.
«A corto plazo estamos trabajando en un proyecto de intercambio con la Policía Nacional y la Guardia Civil española para capacitar a nuestros agentes en investigación criminal, en tráfico o en desactivación de explosivos», explicó.
El trabajo junto a policías de otros países es, según la coronel ecuatoriana, una práctica normal en Ecuador, y es por ello que existen las agregadurías en el extranjero, aunque en el caso de España, «el aumento de la inmigración y la situación de los inmigrantes fue fundamental para su creación».
Con 25 años de experiencia como policía en Ecuador, «donde ahora ya es habitual que haya mujeres en el cuerpo y la discriminación ha disminuido mucho», Gómez de la Torre asegura que afronta «feliz» su nueva etapa en España.
«He venido con toda la familia, con mi esposo y mis hijos, y estamos felices porque estamos juntos. Ahora sólo me falta acostumbrarme al horario y al calor», dijo. EFE