La ecuación de la hipocresía

Por Martín Pallares
Quito, Ecuador

Dime a quién atacas y te diré si te doy asilo o refugio. ¿Que si tu vida peligra? Primero dime si eres enemigo de mis amigos o de mis enemigos.

Alexander Barankov, un ex policía de Biolorrusia, llegó al Ecuador en el 2008.

En Quito montó un blog desde donde empezó a denunciar supuestos actos de corrupción cometidos en su país por Alexander Lukashenko, el presidente a quien se lo conoce como “el último dictador de Europa” por su escalofriante palmarés de violaciones de derechos humanos que ha hecho que toda la Unión Europea le haya prohibido el ingreso a sus países.

Barankov consiguió luego que se le concediera el estatus de refugiado político con el que pensó que se libraría de la persecución del Presidente de su país, donde seguramente sería ejecutado.

Pero la protección a Barankov terminó dos semanas después de que Lukashenko realizara una visita al Ecuador, donde selló su amistad política con el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.

Barankov fue detenido sin importar su condición de refugiado y encarcelado en el antiguo penal García Moreno, donde ahora espera la decisión de la Corte Suprema de Justicia que estudia un pedido de extradición hecho por el siniestro Presidente.

Si eres un estorbo para mis amigos podemos despojarte de la protección que te habíamos dado y enviarte de vuelta a tu país donde podrías ser ejecutado. Si has fastidiado, como Julián Assange, a mis enemigos, tienes nuestra protección. ¿Que si nos importa realmente la vida? ¡Bah!

* El texto de Martín Pallares ha sido publicado originalmente en El Comercio el 19 de agosto de 2012.

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5 Comments

  1. Ya saben don Martín todo es según el color del cristal con que se mira, nada mas.  No les importa que Lukashenko lo pueda condenar a muerte, algo que si se puede allá, como es enemigo de mi amigo, a mi que me importa lo que le hagan, ahí si no está Baltazar Garzón para hablar sus leseras, a los leones, porque me lo pidió mi amiguito.  Falsarios.

  2. Pero el señor 
    Alexander Barankov llegó al Ecuador gracias a que no necesitó visa, y por aquí se oyen clamores de que la culpa de la inseguridad es de los extranjeros  y que se tienen que cerrar las fronteras y mandar de regreso a los extranjeros . Se nota claramente a los hipócritas.

  3. Acierto tras acierto por parte de los articulistas de LaRepública en lo concerniente al asilo de Assange. El texto de Martín, muy lúcido y concreto, como siempre.

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